Nutrición en la enfermedad renal crónica ¿qué puedo comer?


Isabel Félez Justes, Paula Munguía Navarro e Inés Beired Val. FEA Nefrología. Hospital San Jorge. Huesca

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Adecuar la alimentación no sólo es una recomendación saludable en la Enfermedad Renal Crónica (ERC) y en otras patologías, sino que junto con los fármacos es una parte fundamental del tratamiento.

Cuando la ERC se encuentra en la última de sus etapas denominada Enfermedad Renal Crónica Avanzada (ERCA) (pérdida global de la función renal por encima del 70%), presenta una serie de constantes biológicas alteradas como son: el acúmulo de urea, elevación de creatinina y ácido úrico, disminución de la diuresis y retención hídrica, disminución de la excreción a nivel renal de iones como sodio, potasio y fósforo que conducen a una acúmulo en sangre con consecuencias a nivel clínico.
A continuación se describirán la ingesta de los principales nutrientes a regular dependiendo del grado de ERC que presente. La ERC se divide en 5 estadios y es a partir del estadio 3 en donde se realiza una mayor restricción o ajuste.

Recomendaciones nutricionales

• Ingesta de sal: la ingesta de sal varía según las características clínicas de cada paciente. Si el paciente es hipertenso se aconseja una ingesta diaria inferior a 2 gramos al día de sodio es decir, < 5 gramos al día de NaCl y si el paciente no es hipertenso la restricción en torno a 2,3 gramos al día de sodio es decir o 5,75 gramos al día de NaCl. Debemos recordar que una porcentaje muy elevado de los pacientes con ERC son hipertensos y que la HTA mal controlada deteriora la función renal a largo plazo de ahí la importancia de la dieta baja en sal.
• Ingesta calórica: la ingesta calórica recomendada es de 30-35 calorías al día pero puede variar dependiendo de la actividad física del paciente, de si presenta obesidad o no, de si es hombre o mujer y de la etapa del desarrollo en que se encuentre. La obesidad es un factor precipitante del deterioro de la función renal porque produce hiperfiltración (exceso de filtración renal) que mantenida a lo largo del tiempo es perjudicial y puede producir enfermedad renal. La obesidad o sobrepeso empeora la Diabetes Mellitus (DM) o la Hipertensión Arterial (HTA) patologías de alta prevalencia en la ERC.
• Ingesta de grasa: la ingesta de grasa debe suponer menos del 30% de las calorías ingeridas y se recomiendan mejor grasas insaturadas y evitar las saturadas.
• Ingesta proteica: la ingesta proteica en la ERC se recomienda 0,8 gramos por kilo de peso al día y ERCA 0,6 g/kg/día (no inferior a estas cifras). Si el paciente está en hemodiálisis o diálisis peritoneal las recomendaciones serán diferentes. Se recomienda que las proteínas ingeridas en la dieta sean de alto valor biológico (que son de origen animal) y contengan un elevado porcentaje de aminoácidos esenciales.
• Ingesta de hidratos de carbono: la ingesta de hidratos de carbono debe suponer del 30-50% de las calorías totales ingeridas. Se recomienda se recomienda los hidratos de carbono complejos (de absorción lenta) como arroz y pasta frente a los simples como azúcar o chocolates (de absorción rápida).
• Ingesta de calcio: la ingesta recomendada es en torno a 1000-1500 mg al día. En los estadíos más avanzados de ERC se utilizan unos fármacos para disminuir la absorción de fósforo llamados quelantes y algunos de ellos contienen calcio, por lo cual su ingesta se debe limitar. Los pacientes con ERC especialmente en fases avanzadas deben evitar los alimentos o lácteos enriquecidos en calcio para evitar calcificación de arterias y tejidos blandos.
• Ingesta de fósforo: conforme avanzada la ERC el riñón pierde la capacidad de eliminar fósforo por lo que su ingesta se debe reducir. Se recomienda, en líneas generales, una ingesta de fósforo de 800 mg al día. El aumento de fósforo en la sangre junto con el calcio dan lugar a un aumento del denominado producto fosfo-cálcico que produce calcificaciones a nivel de vasos arteriales y tejidos blandos. Hay dos tipos de fósforo: el orgánico y el inorgánico. El fósforo inorgánico se encuentra en los alimentos procesados y en los aditivos. El fósforo inorgánico tiene una biodisponibilidad mucha más elevada que el orgánico y es fácilmente absorbible, por lo que deben evitarse todos los alimentos procesados a los que se les han añadido conservantes, los alimentos manufacturados y precocinados.
• Ingesta de potasio: conforme avanza la ERC el riñón pierde su capacidad de eliminar potasio que se acumula en sangre y si excede los umbrales puede causar arritmias cardiacas. Se recomienda una ingesta de potasio entre 2 y 4 gramos al día ( 50-100 mEq/d) para pacientes ERC estadio 3 y 30-50 mEq/d en ERC estadio 4. Las recomendaciones dietéticas de potasio deben adaptarse individualmente según el estadío de ERC y los niveles de potasio en sangre. El mayor contenido de potasio en los alimentos se encuentran en las frutas y las verduras y dentro de estas podemos diferenciar entre alto, bajo y medio contenido en potasio limitando o no su ingesta. .En fases avanzadas los pacientes reciben recomendaciones dietéticas en cuanto al contenido en potasio de los alimentos y técnicas de cocina como la doble cocción o el remojo de las verduras para ayudar a eliminar su contenido en potasio. Se recomienda no consumir “sales dietéticas” ya que eliminan el sodio de la composición y tienen un elevado contenido en potasio como sustitutivo .

Conclusiones

Los factores dietéticos pueden tener un efecto sobre la progresión de la ERC y también sobre las complicaciones propias, ya que la propia ERC además, también exacerba el riesgo de desnutrición en estos pacientes. Dependiendo del estadio de ERC deberemos prestar especial atención a la ingesta de proteínas, calcio, fósforo, potasio y sodio e ingesta de hídrica. En este ajuste destacan iones como el fósforo y el potasio que son los que, con más frecuencia, se acumulan debido a la falta de eliminación a nivel renal por el deterioro función. Una intervención dietética temprana y adecuada puede retrasar y enlentecer la progresión de la ERC. Un equipo multidisciplinar con nefrólogos implicados y nutricionistas experimentados es clave para el éxito de la dieta en la ERC.