La flebitis es la inflamación de las paredes venosas. A menudo es provocada por la formación de un coágulo sanguíneo (trombo) en su interior, por lo que también se la conoce como tromboflebitis.
¿Cuáles son sus causas?
La tromboflebitis puede afectar a las venas cercanas a la superficie de la piel, denominándose tromboflebitis superficial, o a las venas situadas en los tejidos bajo la piel, denominándose entonces trombosis venosa profunda.
Las causas más frecuentes de esta enfermedad suelen ser las enfermedades infecciosas, pero también puede tener su origen en un traumatismo o por un desencadenante tóxico.
Los coágulos sanguíneos se pueden formar cuando existe un factor que desacelere o cambie el flujo de sangre en las venas.
Los factores de riesgo incluyen, entre otros:
• Reposo prolongado o permanecer sentado en una posición por mucho tiempo, como un viaje en avión.
• Historia familiar de coágulos sanguíneos, lo cual puede implicar la presencia de trastornos hereditarios que llevan a un incremento en el riesgo de la formación de coágulos sanguíneos.
• Fracturas en la pelvis o las piernas.
• Haber dado a luz dentro de los últimos 6 meses.
• Embarazo.
• Obesidad.
• Cirugía reciente (más comúnmente de cadera, rodilla, o cirugía pélvica femenina).
• Tener un catéter permanente en un vaso sanguíneo.
Hay además ciertas afecciones que favorecen la formación de trombos, como por ejemplo el cáncer, los trastornos inmunitarios como el lupus, el tabaco o tomar estrógenos u otras píldoras anticonceptivas.
¿Qué síntomas provoca?
El territorio venoso afecto puede presentar:
• Inflamación
• Dolor
• Enrojecimiento de la piel
• Calor e hipersensibilidad
¿Cuál es el tratamiento?
Ciertos métodos de compresión pueden contribuir a reducir la molestia.Dependiendo del caso, se pueden pautar analgésicos, anticoagulantes para prevenir la aparición de nuevos coágulos (sobre todo en los casos de trombosis venosa profunda), o trombolíticos para disolver el coágulo existente.
Los tratamientos menos comunes son la extirpación quirúrgica de una vena próxima a la superficie o el bypass de la propia vena perjudicada.
Las medidas que puede aplicarse el propio paciente son quitar la presión del área afectada y así reducir el dolor y el riesgo de empeoramiento, y levantar la zona afectada para reducir la inflamación.
En cuanto a las posibles complicaciones, éstas incluyen:
• Embolia pulmonar (trombo en los vasos pulmonares).
• Dolor crónico en el lugar de la tromboflebitis.
• Inflamación crónico en el lugar de la tromboflebitis.
¿Se puede prevenir?
La mejor forma de prevenir la flebitis y los problemas vasculares es cuidar la circulación sanguínea.
En situaciones en que no haya una corriente fluida de sangre se recomienda realizar ciertos movimientos para facilitarla, como por ejemplo, al hacer viajes largos en coche o avión, o trabajar en jornadas laborales largas sentado o de pie. Lo aconsejable es caminar o estirar las piernas de vez en cuando, tomar mucho líquido y usar medias de descanso.
AUTORES
Adriana Ger Buil. F.E.A. Medicina Interna. Hospital Reina Sofía. Tudela.
María Jesús Igúzquiza Pellejero. F.E.A. Medicina Interna. Hospital Reina Sofía. Tudela.
Susana Clemos Matamoros. F.E.A. Medicina Interna. Hospital Reina Sofía. Tudela.
Tina Herrero Jordan. F.E.A. Neumología. Hospital Reina Sofía. Tudela.