El Departamento de Educación a través del Servicio de Atención a la Diversidad, Multiculturalidad e Inmigración y en la Sección de Necesidades Educativas Específicas, ha impulsado un Equipo de Atención Hospitalaria y Domiciliaria que funciona como un módulo más del Centro de Recursos de Educación Especial de Navarra (CREENA).
Dicho equipo abarca dos programas diferenciados pero en muchos momentos complementarios y coordinados: el Programa de Atención Domiciliaria y el Programa de Atención Hospitalaria. En este artículo nos vamos a centrar en este último, pero decir que el Programa de Atención Domiciliaria da respuesta y continuidad educativa a los niños convalecientes en el domicilio y que no pueden asistir a su centro de referencia en un período prolongado y definido de tiempo.
Nuestra actividad en el Programa de Atención Hospitalaria está formado por tres maestros especialistas en pedagogía terapéutica. Se desarrolla fundamentalmente en la cuarta planta materno infantil del Hospital Virgen del Camino de Pamplona, en ella está establecida nuestra Unidad Educativa Hospitalaria que tiene como objetivo el tratamiento integral de los niños y niñas desde el ámbito educativo, desarrollando todas sus capacidades y continuando de esta forma con el proceso de enseñanza/aprendizaje.
La atención educativa se realiza de forma personalizada en el aula o en la habitación y consiste en el seguimiento de aquellas áreas y actividades curriculares propias del niño, siempre de manera coordinada con el centro escolar y, en su caso, con el Programa de Atención Domiciliaria. También nos parece muy importante el apoyo emocional al niño enfermo y suintegración socio-afectiva, fomentando que el niño interactúe con otros niños y con el medio hospitalario. Por nuestra parte, como maestros hospitalarios, hacemos de puente entre el hospital y su colegio o centro de referencia, pero también realizamos actividades y unidades didácticas propias, diseñadas desde nuestra Unidad Educativa.
El Programa de Atención Hospitalaria comienza diariamente a las nueve de la mañana cuando recibimos la información pertinente de las niñas y niños ingresados en el hospital. Estos niños van a ser nuestra clase, nuestros alumnos, de aquí va a partir nuestro trabajo diario. Hacia las nueve y media iniciamos el recorrido por las habitaciones. Es el momento de presentarnos y de conocer a los alumnos y su entorno. En la cuarta planta tenemos veinte posibles habitaciones para visitar, lo hacemos todas las mañanas en aquellas en las cuales hay alumnos nuevos, atendiendo a los niños que ya van al colegio, a partir de tres años. Nosotros siempre les ofrecemos el servicio educativo tanto en el aula como en la habitación, no imponemos nada, ellos aceptan libremente nuestra intervención. El niño acude de manera flexible porque está sujeto al estado de salud, su evolución y las actuaciones del personal sanitario que siempre son prioritarias. Por nuestra parte, desde este primer contacto intentamos alcanzar la empatía con el niño y su familia en el menor tiempo posible, dándoles la confianza necesaria para intentar conseguir normalizar el mundo personal del niño en un medio ajeno y desconocido como es el hospital.
Para poder asistir al aula o recibir atención educativa en la habitación, siempre deben tener la autorización del personal sanitario competente y seguir sus recomendaciones. Los padres acompañan al niño y permanecen, fuera del aula educativa, atentos a cualquier requerimiento por parte del personal sanitario o educativo. Los niños que se encuentran esperando una intervención quirúrgica programada, también pueden asistir al aula siguiendo las indicaciones y el protocolo propio de dicha espera, en muchas ocasiones el paso previo por el aula está contribuyendo a reducir y mitigar el estrés o la ansiedad que supone la entrada a un quirófano.
Nuestra metodología se rige por criterios personalizados, participativos, significativos, motivadores, socializadores y flexibles, siempre condicionados por distintas variables que inciden en nuestro alumnado y que pueden ser físicas, psíquicas, pedagógicas, temporales o espaciales. Ellas marcan las pautas de nuestra actuación. Por nuestra parte todos los días intentamos adaptarnos a las diversas situaciones que se nos plantean. Nuestra metodología, en definitiva, es activa y lúdica, unida a una aplicación del currículo agradable para contribuir a la rápida adaptación del niño a su nueva realidad. Es conveniente, siempre que puedan y cuando la estancia es media o larga, que traigan los libros o material escolar de su centro. Siempre que los niños nos dan la oportunidad, insistimos en aquellos aprendizajes en los cuales tienen más dificultades porque así lo demandan los padres y porque al niño le sirve para volver al colegio con aquellos contenidos más afianzados.
Podríamos definir nuestra aula como una escuela unitaria donde confluyen toda la riqueza educativa de Navarra expresada en diferentes edades, procedencias, modelos lingüísticos y niveles educativos. Cada día nos adaptamos a esta realidad que se nos presenta: realizamos pruebas iniciales, adaptaciones curriculares, programas de atención a la multiculturalidad, exámenes, actividades artísticas y todas aquellas que van surgiendo en nuestra actuación diaria y que abarcan el currículo escolar. Destacar asimismo la importancia que están adquiriendo en nuestra Unidad Educativa Hospitalaria la implantación de las Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación. Nuestro proyecto de innovación educativa tiene como misión aportar las herramientas técnicas, formativas y organizativas necesarias para crear un espacio de aprendizaje, comunicación y apoyo a los alumnos que asisten al aula o que atendemos en las habitaciones. Es un medio óptimo para superar las barreras de comunicación y romper el aislamiento de este alumnado que se encuentra hospitalizado y alejado de su entorno escolar. Internet, en el aula y en las habitaciones, nos ha abierto la posibilidad de conectar en tiempo real al niño con su centro de referencia y poder seguir la actividad diaria o comunicarse con sus compañeros. Este programa está dando muchas satisfacciones a nuestros alumnos de larga estancia.
Añadir que en la Unidad Educativa Hospitalaria el niño se evade por unas horas de su enfermedad, sale de la habitación y va al «colegio». Según aseguran los expertos, en diversos estudios, este rasgo de normalidad le permite recuperarse con una mayor rapidez. También los padres se sienten muy ayudados y agradecidos.
Finalmente, y en nombre del equipo, resaltar el esfuerzo realizado tanto por el Departamento de Educación, el Departamento de Salud y la Fundación CAN, para impulsar la Unidad Educativa Hospitalaria, destacando la coordinación existente entre las tres partes. También quisiéramos agradecer a todo el personal de Virgen del Camino por su acogida y su colaboración diaria en un ambiente sanitario tan nuevo para nosotros.