La Terapia Ocupacional es el uso terapéutico en las actividades de autocuidado, trabajo y juego para incrementar la función independiente, mejorar el desarrollo y prevenir la discapacidad. Puede incluir la adaptación de las tareas y el entorno para lograr la máxima independencia y mejorar la calidad de vida” (American Occupational Therapy Association (AOTA),1986).
De esta definición se extrae que la práctica de la terapia ocupacional, no solo se dirige a las personas, sino también a los entornos en las que éstas se desenvuelven.
Las intervenciones más comunes del terapeuta ocupacional en un domicilio son:
- Valoración de las capacidades funcionales y cognitivas de la persona.
- Rehabilitación personalizada en el domicilio de aquellas personas que así lo requieran tras su valoración.
- Valoración y asesoramiento sobre la necesidad de productos de apoyo y posterior entrenamiento con las mismas tanto a usuarios como a sus cuidadores.
- Asesoramiento sobre estrategias de reentrenamiento en actividades básicas de la vida diaria a los cuidadores.
- Estudiar y determinar la adaptación del entorno y eliminación de barreras arquitectónicas en el domicilio del usuario, proporcionando las soluciones más adecuadas.
Intervención domiciliaria sobre el usuario
Una vez realizada la valoración de la persona, el o la terapeuta ocupacional diseña un plan de intervención. Este plan contemplará los objetivos a corto y largo plazo y las intervenciones necesarias para lograrlo.
Usando las capacidades residuales de las persona el terapeuta ocupacional adaptará y simplificará actividades para que la persona pueda realizarlas de forma autónoma, reeducará y proporcionará estrategias para la ejecución de las mismas en función de las destrezas y limitaciones de cada persona, adaptará la vivienda con el fin de reducir las demandas que presenta el entorno físico de la vivienda facilitando así la realización de las tareas y prescribirá productos de apoyo y entrenará en el uso de los mismos para conseguir la máxima autonomía en las actividades de la vida diaria.
Adaptación funcional del entorno y adquisición de productos de apoyo
Los productos de apoyo (antes llamados ayudas técnicas) se definen como cualquier producto (incluyendo dispositivos, equipo, instrumentos y software) fabricado especialmente o disponible en el mercado para prevenir, compensar, controlar, mitigar o neutralizar deficiencias, limitaciones en la actividad y restricciones en la participación. www.ceapat.es. La indicación de un producto de apoyo o una adaptación en el domicilio a de realizarse por parte de un profesional y tiene que cumplir una serie de requisitos con el fin de que sea adecuada y cumpla la función para la que se prescribe:
1. En primer lugar hay que realizar una valoración exhaustiva de la persona con sus capacidades y limitaciones con el fin de que se ajuste a la funcionalidad del usuario. Además tiene que estar consensuada tanto con la persona que va a utilizarla como con los cuidadores o familiares que componen su entorno y tiene que existir una implicación y un deseo por parte de estos en la adaptación o adquisición de un producto de apoyo.
2. En segundo lugar la adaptación o la adquisición del producto de apoyo ha de ser viable, es decir, tienen que existir posibilidades de adaptación que permitan que la persona permanezca en su hogar en condiciones de calidad de vida suficientes y a de poder entrar y salir de su hogar evitando que quede confinado en su vivienda y el coste de las mismas a de ser equivalente a los beneficios que la adaptación o el producto de apoyo le va a revertir y le va a permitir ser autónomo.
3. En tercer lugar, y no por ello menos importante, toda adaptación o adquisición de un producto de apoyo tiene que venir acompañado de una explicación y entrenamiento sobre su uso adecuado a cada persona y realizado por un profesional en el propio domicilio donde se va a desarrollar la actividad.
En España existe el Centro Estatal de ayudas técnicas (CEAPAT) como centro de referencia estatal de autonomía personal y ayudas técnicas. Además cuenta con delegaciones en Albacete, Lardero (La Rioja), Salamanca y San Fernando (Cádiz). En ellas el terapeuta ocupacional realiza las funciones de asesoramiento, demostración e indicación de productos de apoyo y adaptaciones del entorno en colaboración con otros profesionales. En Navarra en la actualidad no existe ningún centro ni servicio de referencia y desde el equipo de Valoración de la situación de dependencia se constata la necesidad de creación del mismo. La realización de una adaptación funcional o la adquisición de un producto de apoyo adecuado reduce considerablemente las necesidades de asistencia domiciliaria pero en ocasiones, tras esta intervención, no se logra la máxima autonomía en alguna o todas las actividades de la vida diaria por lo que habrá que intentar minimizar los déficit e instruir al cuidador para ayudar a la persona en el desempeño de las mismas.
Intervención domiciliaria sobre el entorno físico y humano
El entorno físico comprende los espacios físicos en los que vive la persona y los objetos que existen en ellos y con los cuáles interactúa. Las técnicas y actividades utilizadas son:
- Eliminación de barreras arquitectónicas: se trata de eliminar barreras y adaptar los espacios físicos en los que se desenvuelve la persona para que la persona pueda acceder a ellos sin sobreesfuerzos innecesarios y hacer uso de las instalaciones y los objetos de manera autónoma, segura y cómoda. Por ejemplo cambiar bañera por ducha a ras de suelo, bajar el ascensor a ras del portal eliminando las escaleras, anchar marcos de puertas….
- Adaptación cognitiva y funcional del entorno: mediante esta técnica se pretende compensar las limitaciones y facilitar los rendimientos de la persona para que presenta un menor trastorno funcional. Las acciones irán dirigidas a minimizar factores de riesgo (iluminación adecuada, instalaciones eléctricas seguras,…), simplificar el ambiente (organización de espacios, electrodomésticos “inteligentes”, eliminar objetos innecesarios…), favorecer la orientación (carteles indicativos, relojes, luz nocturna,…) y potenciar la autonomía (objetos fácilmente localizables, ropa preparada en el orden adecuado,…).
El entorno humano cpprende a los cuidadores de las personas y como las actitudes, habilidades y conductas de los mismos influyen en su desempeño ocupacional. Las intervenciones desde TO con cuidadores serán:
- Aconsejar sobre la mejor manera de realizar las actividades básicas de la vida diaria para favorecer la autonomía y/o evitar la sobrecarga.
- Dar pautas de manejo ante situaciones concretas.
- Informar sobre enfermedades y limitaciones que conllevan para conocer los motivos que subyacen a muchos de los trastornos conductuales y problemas planteados, favoreciendo actitudes más adecuadas.
- Informar sobre técnicas de comunicación adecuadas.
- Asesorar, formar y entrenar en el uso de productos de apoyo que han de ser manejados por ellos para facilitar el cuidado de las personas a su cargo.