La distocia de hombros se define como la dificultad en la salida espontánea de los hombros por el impacto del hombro anterior contra la sínfisis del pubis, o más raramente, del hombro posterior contra el promontorio del sacro. Es una emergencia obstétrica impredecible e imprevisible. En el 50% de los casos no se asocia a factores de riesgo anteparto ni intraparto identificables.
Se necesitan maniobras obstétricas adicionales para desprender los hombros tras el fracaso de la tracción axial normal de la cabeza fetal. Su adecuado manejo busca el nacimiento seguro del feto y evitar lesiones por hipoxemia y minimizar o evitar daño neurológico periférico o traumatismo materno o fetal.
Factores de riesgo
La mayoría de los casos ocurren en ausencia de factores de riesgo identificables. Los factores de riesgo anteparto a destacar son, por ejemplo: antecedente de distocia de hombros previa, macrosomía fetal actual, antecedente de macrosomía, gestación cronológicamente prolongada, obesidad materna (IMC >30 kg/m2), incremento ponderal excesivo (>20 kg), diabetes mellitus materna, diabetes gestacional, etc. También existen otros factores de riesgo intraparto.
Variedades de distocia
Se distinguen 3 variedades de distocia de hombros según el hombro impactado:
- Anterior: la más frecuente.
- Posterior.
- Bilateral: la más grave pero excepcional.
Hay que actuar de una forma secuencial y ordenada para hacer efectivo el parto en un breve periodo de tiempo, mediante la aplicación sistemática de una serie de maniobras destinadas a facilitar el desprendimiento del hombro impactado.
Existen maniobras de primer nivel (Maniobra de Mc Roberts y presión suprapúbica), de segundo nivel (Maniobra de Woods, Maniobra de Barnum/Jazquemier, tracción digital de la axila posterior, Maniobra de Gaskin) y de tercer nivel (Maniobra de Gunn-Zavanelli-O’Leary, rescate abdominal, Fractura clavicular intencionada, Maniobra de Zarate).
A destacar la maniobra de Mc Roberts (de primer nivel) que es la primera opción a elegir. Es sencilla, segura y efectiva. Hasta el 90% de distocias se resuelven.
La distocia de hombros no se puede predecir ni prevenir ya que no existe ningún método para identificar los fetos que sufrirán esta complicación.
AUTORES
Alexandra Natalia Revnic, Laura Gil Arribas. MIR Obstetricia y Ginecología
Noelia Lázaro Fracassa, Claudia Giménez Molina. FEA Obstetricia y Ginecología.
Hospital Universitario San Jorge. Huesca.