Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de muerte en mujeres a nivel mundial, superando incluso al cáncer. Aunque comparten factores de riesgo tradicionales con los hombres —como diabetes, hipertensión, obesidad y tabaquismo—, las mujeres presentan una vulnerabilidad mayor ante estos mismos factores.
Además, existen riesgos específicos del sexo femenino que suelen pasar desapercibidos en la práctica clínica: síndrome de ovario poliquístico, infertilidad, abortos espontáneos, menopausia precoz y complicaciones del embarazo (preeclampsia, diabetes gestacional, parto prematuro…).
También se suman enfermedades más prevalentes en mujeres como lupus, artritis reumatoide, migrañas con aura y depresión, todas ellas asociadas a un mayor riesgo cardiovascular.
La Guía de la Sociedad Europea de Cardiología sobre Manejo de la Enfermedad Cardiovascular y Embarazo dedica un capítulo a las complicaciones durante el embarazo, con repercusión a largo plazo en forma de un mayor riesgo de eventos adversos cardiovasculares.
En el documento se propone el desarrollo de clínicas especializadas en salud cardiovascular femenina, con evaluación del riesgo cardiovascular a largo plazo, educación sobre estilo de vida y prevención y coordinación multidisciplinaria (cardiología, ginecología y endocrinología).
En la misma línea, la Sociedad Española de Cardiología, junto con varias sociedades científicas nacionales relacionadas con la atención integral a la mujer, ha publicado recientemente un documento de consenso para la prevención cardiovascular a lo largo de las diferentes fases de la vida de la mujer.
Reconocer la singularidad del riesgo cardiovascular en la mujer es clave para reducir su morbimortalidad. Desde Consulta Dr. Azcárate trabajamos de manera conjunta con especialistas en Ginecología, Endocrinología, Análisis Clínico y expertos en ejercicio físico para ofrecer una atención integral a las mujeres centrada en la prevención cardiovascular.

Firma invitada:
Dr. Emilio Nasarre Lorite. Cardiólogo.


