La candidiasis vaginal es una infección común que muchas mujeres experimentan en algún momento de sus vidas. Aunque puede ser incómoda y molesta, es tratable y se puede prevenir con los cuidados habituales.
La candidiasis es una infección causada por un hongo llamado Candida, que vive de manera natural en nuestro cuerpo. Cuando hay un desequilibrio en la flora vaginal la Candida puede multiplicarse y causar una infección. Es una de las infecciones vaginales más frecuentes y no se considera una enfermedad de transmisión sexual (ETS), aunque puede estar asociada con la actividad sexual.
Síntomas de la candidiasis vaginal más comunes
• Picazón intensa en la vagina y vulva.
• Enrojecimiento e inflamación en la zona vulvar.
• Flujo vaginal espeso, blanco y similar al requesón, no siempre presenta un mal olor.
• Dolor o ardor al orinar o durante las relaciones sexuales.
Si experimentas cualquiera de ellos es importante no automedicarte sin confirmar primero la causa.
Consulta al ginecólogo
Cuando consultes a tu ginecólogo, este realizará una serie de pasos para confirmar la infección:
• Historia clínica: te hará preguntas sobre tus síntomas, antecedentes de salud, uso reciente de antibióticos o si has tenido episodios anteriores de candidiasis.
• Es posible que el médico tome una pequeña muestra de flujo vaginal para confirmar la presencia del hongo.
Tratamiento
El tratamiento de la candidiasis vaginal generalmente es eficaz y puede incluir:
• Medicamentos antimicóticos tópicos: en forma de cremas, supositorios vaginales o tabletas, y se aplican directamente en la zona afectada.
• Medicamentos orales.
El tratamiento suele durar entre uno y siete días dependiendo de la gravedad de la infección. Es importante seguir las indicaciones de tu médico para asegurarte de que la infección se trata completamente.
¿Cuándo consultar a tu ginecólogo?
• Si es la primera vez que experimentas síntomas de candidiasis y no estás segura del diagnóstico.
• Si los síntomas son graves o no mejoran después de usar tratamiento sin receta.
• Si experimentas candidiasis de manera recurrente (más de cuatro veces al año), lo que podría indicar una infección crónica o un problema subyacente.
• Si estás embarazada o tienes un sistema inmunológico debilitado, ya que podrías necesitar un tratamiento especializado.
• Si el flujo vaginal tiene un olor fuerte o inusual.
Prevención
Prevenir la candidiasis vaginal es posible mediante una serie de hábitos saludables que ayudan a mantener el equilibrio natural de la flora vaginal:
• Mantén una buena higiene íntima, usa ropa interior de algodón, evita ropa ajustada.
• Controla el uso de antibióticos. Aunque son necesarios en muchos casos, pueden eliminar las bacterias saludables junto con las malas, favoreciendo el crecimiento del hongo Cándida.
• Lleva una dieta equilibrada: reducir el consumo excesivo de azúcar y carbohidratos refinados ya que algunos estudios sugieren que los niveles elevados de azúcar pueden favorecer el crecimiento del hongo.
AUTORES
Jennifer Castellanos Artal. Médico Interno Residente Ginecología y Obstetricia. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza.
María Pérez Marqués. Médico Interno Residente Ginecología y Obstetricia. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza.
Cristina Luna Álvarez. FEA Ginecología y Obstetricia. Hospital Barbastro. Huesca.
Eva Valle Blasco. Médico Interno Residente Ginecología y Obstetricia. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza.
Irene Sancho Catalán. Médico Interno Residente Ginecología y Obstetricia. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza.
Pilar Maestro Quibus. Médico Interno Residente Ginecología y Obstetricia. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa. Zaragoza.