Carro de paradas


Cristina Caballero García, Raquel Olmos Sánchez, Piedad Fleta Cubero, Francisco Landa Vidal.

Print Friendly, PDF & Email
Las posibilidades de supervivencia de la persona afectada dependen de la concurrencia de varias circunstancias, que se han dado en llamar cadena de supervivencia: conjunto de procesos, que realizados de forma ordenada, consecutiva y en un periodo de tiempo lo más breve posible, han demostrado científicamente ser los más eficientes para tratar a los pacientes con parada cardiaca.

En esta cadena intervienen, entre otros factores, la formación y las habilidades de los profesionales ante este tipo de situaciones, el lugar físico donde se produzca el evento, el número de profesionales disponibles para atender la emergencia y cómo no, la existencia de los medios y materiales necesarios (medicación, material sanitario y aparataje).

Se establecen unos criterios mínimos, en cuanto a la dotación y revisión del material integrante de un Carro de Paradas (según la unidad donde se encuentre) y de un Maletín de Urgencias (para la prestación de asistencia en el exterior del centro), que permita a los profesionales responder adecuadamente a la situación, independientemente del centro de salud donde presten sus servicios en ese momento, de manera que todo lo necesario esté disponible y en perfecto estado, minimizando la posibilidad de error.

Debe ubicarse en una zona accesible y ésta debe ser conocida por todos los profesionales que llegado el momento tengan que utilizarlo. También es de vital importancia que disponga de todo el material necesario; y que la medicación, el material sanitario y el aparataje estén listos, en todo momento, para su uso.

Objetivos

  • Garantizar la prestación de una atención sanitaria urgente de calidad, a la población, en todos los Centros de Salud de Atención Primaria.
  • Servir de base para que se integren diferentes aspectos de esta actuación y que garantice un adecuado funcionamiento, teniendo en cuenta diferentes aspectos:
    • Unificar los criterios referentes a la revisión y mantenimiento de los dispositivos para la atención urgente (Carro de Paradas y Maletín), estableciendo el mecanismo de revisión y reposición de los elementos incluidos en el mismo.
    • Identificar la medicación y materiales necesarios para las actividades de la emergencia.Revisar y actualizar la relación del material sanitario y de los medicamentos que deben formar parte de estos dispositivos.
    • Unificar en todos los centros de salud dichos contenidos y revisiones.
    • Difundir esta información.
    • Presentar e implantar un protocolo de revisión y mantenimiento del carro de paradas en los centros de salud, que dé respuesta asistencial a la PCR de acuerdo con las recomendaciones internacionales actuales.
    • Promover medidas de intervención precoz.
    • Desarrollar un programa de formación y entrenamiento periódico en RCP y SV para el personal sanitario y no sanitario del Sector.

Características del carro

  • No existe un único modelo de Carro de Paradas, pero sí existen unas consideraciones que todo carro debe reunir. Entre otras, señalamos las siguientes:
  • Características físicas:
    • Debe poder desplazarse.
    • Debe contar con cajones.
    • Estará subdividido por apartados, diferenciando, si es posible, por colores:
    • Aparato Circulatorio: color rojo.
    • Aparato Respiratorio: color azul.
  • En lo referente a los fármacos éstos deberán estar ordenados alfabéticamente por principio activo.

La ejecución de las actividades para el mantenimiento del Carro de Paradas corresponde fundamentalmente al personal de enfermería de cada uno de los centros o servicios.

 Descripción de las labores de mantenimiento

1.- Carro de emergencias:

  • Mantener limpio.
  • Revisar y reponer el material según servicio y tras cada uso.
  • Precintar tras su revisión.

2.- Monitor desfibrilador:

  • Mantener limpio.
  • Limpiar las palas tras su uso.
  • Comprobar diariamente:

– Descarga.

– Batería (correcta conexión a fuente eléctrica).

– Papel.

– Gel conductor.

– Presencia de componentes: cable ECG, cable pulsioxímetro, palas y parches

3.- Aspirador:

  • Mantener limpio (agua de residuos).
  • Comprobar diariamente la correcta aspiración.

4.- Oxígeno:

  • Comprobar la carga de las botellas con el manorreductor (si tiene precinto, significa que está llena).

5- Bolsa-reservorio (ambú®):

  • Comprobar su presencia, incluida mascarilla (tamaño adulto y pediátrico) y filtro antibiótico.
  • Mantener limpia.
  • Comprobar el volumen de aire de las mascarillas e inflar si es preciso.
  • Mantener conectada alargadera para oxígeno.

6- Laringoscopio:

  • Comprobar su buen estado y limpieza.
  • Comprobar que funciona correctamente y que haya pilas y bombillas de repuesto.
  • Comprobar la presencia de todas las palas, incluida la recta pediátrica.
  • El laringoscopio puede ubicarse en el segundo cajón (correspondiente al material para la vía aérea) e igualmente en la bandeja superior, para evitar quitar el precinto de los cajones para su revisión.

7- Medicación y material fungible:

  • Revisar medicación y material del tras su uso, incluida caducidad del material.
  • Reponer los productos bajo mínimos.
  • Colocar Adrenalina y Amiodarona en la parte anterior izquierda del primer cajón.

8- Glucómetro:

  • Comprobar su presencia.
  • Comprobar la presencia de tiras reactivas y verificar su caducidad.
  • Comprobar la coincidencia de código de tiras reactivas y glucómetro.

9- Saturómetro:

  • Encender para comprobar el correcto funcionamiento.
  • Comprobar la carga de batería.
  • Comprobar la presencia del sensor adulto y pediátrico.

Contenido del carro de paradas

Encima del carro: desfibrilador, electrodos, contenedor de objetos punzantes, gel conductor, libro de funcionamiento del desfibrilador y protocolo del carro de paradas.

Bandeja B-1: adrenalina, atropina, amiodarona de 150 mg, bicarbonato sódico, cloruro cálcico, furosemida, midazolam, naloxona, lidocaína al 2%, glucosmón, sulfato de magnesio, manidón y anexate.

Cajón C-1: guantes estériles de diversas tallas, esparadrapo, gasas estériles, apósitos quirúrgicos, catéteres Abbocath de 14G a 24G, compresores, palomillas de adulto y de niños, jeringas de gasometría, tubos de extracción (hematología, bioquímica y coagulación), vías con alargadera y tapones.

Cajón C-2: pinzas de Magill pequeña y grande, tubos endotraqueales (del 8’5, 8, 7’5, 7, 6, 5’5, 4’5, 3’5 y 2’5), Guedel, laringoscopio y palos de distintos tamaños, sondas de aspiración (verdes, negras, azules y naranjas), lidocaína, lubricante urológico, cánulas de aspiración estériles Yankauer finas y gruesas, fiadores, y pinzas Kocher.

Cajón C-3: gafas nasales, mascarilla con reservorio, caudalímetro, alargadera, suero fisiológico, kit de vía central, ampollas de agua destilada, jeringas (de 20, 10, 5 y 2 ml) y agujas de carga.

Cajón de abajo: sistema de aspiración completo, ambú, suero glucosalino, Venofusin (bicarbonato sódico 1M), gelafundina, ringer-lactato de 1000 ml, suero fisiológico (de 500, 100 y 50 ml).

En lateral, contenedor de aspiración, tabla y conector de vacío.

AUTORES:

Cristina Caballero García. Auxiliar Administrativa. Hospital Ntra. Sra. de Gracia.

Raquel Olmos Sánchez. Auxiliar de Enfermería. Hospital Ntra. Sra. De Gracia.

Piedad Fleta Cubero. Celadora. Hospital Ntra. Sra. de Gracia.

Francisco Landa Vidal. Técnico de Imagen y Diagnostico. Clínica Montpelier.

BIBLIOGRAFIA:

INTERNET: https://revistasanitariadeinvestigacion.com/carro-de-paradas