Colocación de Holter cardíaco


Adriana Martínez Sarría. Enfermera de Cardiología. Hospital Reina Sofía. Tudela

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Un monitor holter es un pequeño dispositivo portátil que el paciente llevará puesto habitualmente durante 24 horas y que monitorizará constantemente la actividad eléctrica de su corazón.

¿A qué pacientes se les coloca habitualmente un holter?

El uso de estos dispositivos está recomendado en pacientes que presentan o existe sospecha de que puedan estar teniendo eventos arrítmicos.
En función de los resultados de la prueba se podrá, en caso de que sea necesario, empezar tratamiento médico, ajustarlo en caso de que ya esté pautado e incluso ofrecer al paciente tratamientos no farmacológicos para la supresión o disminución de la frecuencia de estas arritmias.

¿En qué consiste el proceso de colocación de un holter?

El paciente deberá venir a la consulta de enfermería de cardiología el mismo día de la prueba sin ninguna restricción de vestimenta, alimenticia ni medicamentosa (a no ser que su médico le haya pedido en la consulta previa que realice algún cambio para la prueba).
Antes de comenzar con la colocación del holter es importante que el profesional de enfermería compruebe que, efectivamente, al paciente se le ha solicitado un holter cardíaco y que nos encontramos ante el paciente correcto.
Además debemos asegurarnos que tenemos a nuestra disposición el material necesario para su colocación: el holter, los cables, los electrodos, un bolso, gasas, suero fisiológico, rasuradora, malla y un sobre con un documento de registro de incidencias en su interior.
Una vez comprobado lo anterior, se le pedirá al paciente que se retire toda la ropa de cintura para arriba en un área de la consulta donde pueda preservarse su intimidad, posteriormente nos aseguraremos de que la zona del tórax se encuentra exenta de vello y en caso de no ser así, rasuraremos el área donde irán pegados los electrodos.
Posteriormente, limpiaremos la piel con unas gasas impregnadas de suero fisiológico (así retiraremos la suciedad más superficial y ayudaremos a mantener la piel seca y libre de sudor), el siguiente paso será la colocación de los electrodos, que irán adheridos a la piel del paciente a los que posteriormente conectaremos los cables y el holter, que finalmente meteremos un bolso para que el paciente pueda llevarlo colgado cómodamente. Los siguientes pasos serán la comprobación en el ordenador de que el registro se ve adecuadamente y la colocación de una malla de sujección que cubra cada uno de los elementos anteriormente mencionados.
El último paso consiste en explicar al paciente que debe hacer una vida totalmente normal y que lo único que no podrá realizar durante las próximas horas será desconectar el holter ni ducharse o realizar otras actividades que implequen mojarlo. Además le indicaremos que deberá documentar en la hoja de incidencias cualquier evento que pueda notar durante estas horas junto con la actividad que estaba realizando en ese momento y la hora aproximada a la que se ha producido.
Finalmente, antes de que el paciente abandone la consulta le explicaremos como debe retirarse el holter y acordaremos con él una hora de entrega.