Se acerca el invierno y vamos a hablar de cómo cuidarse y prevenir catarros y gripe. Son enfermedades víricas que se trasmiten a través de las gotas expulsadas al toser y estornudar. También al tocar objetos previamente contaminados con virus y tocarse luego la boca o la nariz.
¿Qué hacer para prevenir?
No existe vacuna contra el catarro, pero sí contra la gripe con la vacunación antigripal, indicada en mayores de 65 años, personas con enfermedades crónicas, personas cuidadoras y profesionales de la salud.
El sistema inmune es el encargado de protegernos contra gérmenes y microorganismos que nos rodean. Fortalecerlo nos ayuda a prevenir. Para ello, es útil llevar una vida lo más saludable posible: Consumir frutas, verduras, cereales integrales y legumbres que aportan a nuestro organismo las vitaminas y minerales necesarios para mejorar nuestras defensas. Además, descansar suficiente, realizar algo de ejercicio físico diario y evitar el tabaco y la cafeína.
¿Cómo cuidarse ante un catarro o gripe?
Catarros y gripe pueden curarse sin necesidad de antibióticos, con algunos cuidados: Beber abundantes líquidos y hacer vahos facilitan la hidratación y ayudan a eliminar el moco. Los gargarismos, principalmente antes de acostarnos y al levantarnos, son eficaces para aliviar el dolor de garganta (pueden ser con miel y limón o con agua y sal). Conviene descansar y se puede tomar algún analgésico-antitérmico si hay malestar o dolor de cabeza o fiebre. No fumar.
Para evitar trasmitirlo a otras personas conviene lavarse las manos con frecuencia, utilizar pañuelos desechables y taparse la boca al toser o estornudar.
Acudir al centro de salud si la persona afectada es una mujer embarazada, niño menor 2 años, un anciano o tiene una enfermedad crónica. También si tiene dolor o supura el oído, dificultad para respirar o moco verde o con sangre. Si tiene fiebre mayor 39 grados o dura más de 4 días.