Doctor estoy deprimido, ¿debería hacer ejercicio?


Sophie Gorostiaga Maurer, Lizar Zabala Díaz, Iban Plaza Izurieta, Claudia Villanueva Larumbe, Elena Roldán Arcelus y Leyre Oliver Ruiz

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Realizar ejercicio físico es uno de los pilares fundamentales en la prevención de 35 enfermedades crónicas. También es una de las primeras líneas de tratamiento de múltiples enfermedades como es el caso de la depresión. Esta es una importante causa de morbilidad y mortalidad en el mundo.
Su tratamiento habitual son los antidepresivos pero también existen otro tipo de terapias efectivas como es el ejercicio físico.

Son múltiples los estudios que han demostrado los beneficios del ejercicio físico en los pacientes con depresión. Realizar actividad física de manera regular y tener una buena forma física disminuyen la probabilidad de desarrollar una depresión y en el caso de padecerla favorecerán que ésta sea menos grave. También se sabe que el ejercicio físico disminuye de manera más importante los síntomas y el número de recaídas a largo plazo que los fármacos.

El mecanismo por el cual hacer ejercicio produce efectos beneficiosos sobre la depresión parece ser multifactorial. Por un lado, puede que exista un componente social o emocional ya que los pacientes refieren sentirse como una persona más, libre de enfermedad, al realizarlo. Por otro lado, hacer ejercicio les ayuda a tener una mayor tolerancia a síntomas que habitualmente se asocian con ansiedad como son el aumento de la frecuencia cardíaca o la sensación del falta de aire y que, sin embargo, son totalmente normales cuando se realiza ejercicio.

Cuando se llega a realizar a cierta intensidad resulta complicado pensar al mismo tiempo y, por lo tanto, ayuda a no tener pensamientos rumiantes y evita preocuparse en exceso. Incluso produce cambios del tamaño de ciertas zonas del cerebro (hipocampo) que están relacionadas con la memoria o la depresión y también prolonga la vida de las neuronas.
 Todavía no se ha descubierto cual es la prescripción exacta para este  tipo de pacientes. Las recomendaciones serían las dadas a cualquier otra persona (150 minutos de ejercicio aeróbico a intensidad moderada o 75 minutos a intensidad vigorosa y 2-3 días de entrenamiento de fuerza semanales). Si se puede decir que en estos casos es mejor realizar ejercicio combinado (aeróbico y de fuerza) y que a mayor número de sesiones mayores serán los beneficios. 

Por lo tanto, si usted se siente triste o deprimido puede que comprarse unas zapatillas o apuntarse a un gimnasio sea la mejor de las medicinas.

AUTORES

Sophie Gorostiaga Maurer. FEA Medicina Física y Rehabilitación del HUN.
Lizar Zabala Díaz. FEA Cardiologia del HUN.
Iban Plaza Izurieta, Claudia Villanueva Larumbe y Elena Roldán Arcelus. FEA Medicina Física y Rehabilitación del HUN.
Leyre Oliver Ruiz. MIR Medicina Física y Rehabilitación del HUN