El verano y las varices


Dr. José Manuel Jiménez. Cirujano vascular. Clínica San Juan de Dios de Pamplona y Policlínica Navarra de Tudela

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La llegada del verano y, por tanto del buen tiempo, implica un aumento del tiempo libre, de las actividades al exterior, playa, etc. Pero para las personas con varices es una mala época. Por un lado, por el efecto estético de las mismas, puesto que es habitual llevar menos ropa y se ven más; y por otra, porque, con el calor, las varices dan más síntomas y son más habituales sus complicaciones.

Es muy frecuente que una variz asintomática comience a producir cansancio, pesadez, calambres, picor, edema, etc., cuando comienza el buen tiempo. Del mismo modo es más habitual la presencia de hemorragias y varicoflebitis. Por ello, es aconsejable tratar este problema antes de que empiece el calor, para llegar al verano en las mejores condiciones posibles y poder disfrutarlo.
El tratamiento de las varices debe ser personalizado, puesto que depende mucho de su calibre, localización, causa, etc. Por ello, ante la presencia de una variz es recomendable acudir a un Cirujano Vascular para abordar este problema de una forma global. Es imprescindible una buena exploración física y un eco-doppler venoso en color completo. De este modo se consigue un diagnóstico preciso y se puede ofrecer el tratamiento idóneo para cada caso.
La modalidad terapéutica tradicional ha sido la quirúrgica. Si bien ofrece buenos resultados, necesita anestesia raquídea o general, es preciso realizar incisiones para extirpar los segmentos venosos insuficientes, y ello conlleva un período de recuperación prolongado, de entre 4 y 6 semanas.

La esclerosis con microespuma

Por el contrario, la esclerosis con microespuma es una alternativa al tratamiento quirúrgico pero sin las complicaciones de este. Permite realizar el tratamiento de una forma ambulatoria, sin anestesia, y no precisa período de recuperación, de modo que el paciente puede reincorporarse a sus actividades cotidianas de forma inmediata. Consiste en la inyección de un agente esclerosante en el interior de los segmentos venosos insuficientes, lo cual conduce a su cierre y paulatina desaparición.
Cuando existe insuficiencia de la safena interna o externa, la mejor forma de administrar la espuma es el catéter Clarivein®. Se trata de un dispositivo que se introduce en la vena insuficiente mediante una punción con anestesia local y que combina el efecto químico de la espuma junto con el mecánico de su rotación a gran velocidad. Ello permite tratar la safena interna o externa en una sola sesión, lo cual acorta sensiblemente la duración de los tratamientos. También se trata de un procedimiento ambulatorio después del cual se puede hacer vida normal.
La idea generalizada es que la esclerosis sólo es útil para varices de pequeño calibre, pero no es cierto. Donde la microespuma demuestra su mayor efectividad es en varices de cierto calibre. Se puede decir que cualquier variz subsudiaria de tratamiento quirúrgico se puede tratar mediante esclerosis con microespuma, mientras que lo contrario no es cierto.
El tratamiento de las varices menos invasivo es la esclerosis con microespuma o el catéter Clarivein®. Realizado por un cirujano vascular con experiencia ofrece similares resultados a la cirugía pero con una tasa de complicaciones mucho menor y, lo más importante, pudiendo realizar vida normal a lo largo del tratamiento.