Manejo de los dilatadores de Hegar en el Hospital Universitario San Jorge


Olga Rivas Calvete, Marta Delgado Puente, Sonia Dieste Samitier, Lorenzo Oliván Guerri, María Carmen Lasierra Betrán y Blanca Marzal López.

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La estenosis anal es la disminución del calibre del conducto anal que se acompaña de una menor distensibilidad del mismo.

Puede presentarse como complicación tardía tras hemorroidectomía, esfinterectomía por fisura anal, enfermedad inflamatoria intestinal (EII) como consecuencia de la fibrosis intensa producida por abscesos de repetición en el curso de la misma y como secuela de radioterapia pélvica.
Los pacientes presentan dificultad para la expulsión de las heces que disminuyen de calibre y además se acompaña de tenesmo, hemorragia o cuadros suboclusivos.

Dilatación neumática y forzada

Han sido probados diversos tratamientos como la dilatación neumática y la dilatación forzada con anestesia sino obtener resultados satisfactorios.
En el Servicio de Endoscopias del Hospital Universitario San Jorge utilizamos los dilatadores de Hegar para intentar mejorar la estenosis anal. Son unos vástagos metálicos que van aumentado de calibre siendo el menor de 11mm (número 11) hasta 18 mm (número 18) que se han usado en medicina tradicionalmente para tratar problemas urológicos (dilataciones uterinas), problemas pediátricos (ano imperforado) y en menor grado en estenosis anales.
Este tratamiento puede ser realizado en el domicilio del paciente previo adiestramiento del mismo y supone un ahorro de tiempo y económico debido a que se evitan ingresos hospitalarios y pérdida de días de trabajo.
Una vez aconsejado su uso por el especialista (digestivo o cirujano) el paciente es derivado a la consulta de enfermería del servicio de endoscopias.
El procedimiento para el uso de los dilatadores de Hegar se realiza colocando al paciente tumbado en la camilla acostado sobre su lado derecho con las piernas flexionadas . Realizamos una exploración anal para comprobar que puede introducirse el dedo en el ano sin dificultad y que no se palpa ninguna masa en el canal anal. Procedemos a la dilatación del ano con un dilatador de pequeño calibre, número 11 o 12. Si no encontramos dificultad en la realización de la técnica, iremos escogiendo dilatadores de diámetros superiores para prodecer a su uso sin provocar dolor al paciente ni sangrado. Una vez determinado el dilatador de mayor calibre que ha sido posible introducir sin causar molestias al paciente, terminamos el procedimiento. Éste será el dilatador que usará el paciente en su domicilio siguiendo la siguiente secuencia..
Al inicio del tratamiento realizará la dilatación 2 veces al día (mañana y noche) durante 1 ó 2 minutos. Una vez introducido el dilatador en el ano realizará movimientos circulares con el mismo con el fin de intentar romper la fibrosis anal. Previamente a su introducción lubricará el dilatador con lubricante urológico para anestesiar la zona anal o aceite si no dispone del primero.
El paciente usará el mismo dilatador durante 1 semana y si no observa dificultad para introducirlo pasará a utilizar el que sigue en calibre. Este proceso de cambio de número de dilatador lo realizará semanalmente hasta intentar alcanzar el uso del de mayor calibre. Si durante el procedimiento se produjera sangrado o dolor, el paciente deberia continuar con la técnica descrita pero disminuyendo el calibre del dilatador utilizado.
Una vez establecido el dilatador de mayor calibre que ha logrado introducir, debe continuar realizando las dilataciones de la siguiente forma:
-1 vez al día durante 1 mes.
-A días alternos durante 1 mes.
-Cada 3 días durante 1 mes.
-1 vez a la semana durante 1 mes
-1 vez al mes durante 3 meses.
En la consulta de enfermería citamos de forma periódica a los pacientes para hacer un seguimiento de su evolución, aprovechando la cita para cambiar el material para la realización de las dilataciones y resolviendo las dudas que los pacientes nos plantean sobre la actitud a seguir. A su vez contamos con pacientes que utilizan los dilatadores de forma crónica ya que han encontrado beneficio en su uso al mejorar el grado de estenosis anal que padecen. Con ellos mantenemos contacto telefónico para realizar seguimento de su evolución y necesidades.

AUTORES:

Olga Rivas Calvete, Marta Delgado Puente, Sonia Dieste Samitier, Lorenzo Oliván Guerri, María Carmen Lasierra Betrán y Blanca Marzal López.
Enfermeros de la Unidad de Endoscopias Digestivas. Hospital Universitario San Jorge