Tomar medicamentos como el alprazolam (usado para la ansiedad) y beber alcohol al mismo tiempo puede ser muy peligroso. En este artículo te contamos el caso de un hombre que sufrió una intoxicación por combinar su medicación con varias cervezas en una fiesta. Tuvo que ser llevado de urgencia al hospital, donde recibió atención médica y logró recuperarse. Este caso sirve como una advertencia para todos: mezclar alcohol con ciertos medicamentos puede poner en riesgo tu salud—incluso tu vida.
Introducción
El alprazolam es un medicamento recetado para tratar la ansiedad. Actúa relajando el cerebro. El alcohol también tiene un efecto depresor en el sistema nervioso. Cuando se combinan, sus efectos se potencian, lo que puede causar somnolencia extrema, dificultad para hablar, para moverse, e incluso pérdida del conocimiento.
Caso clínico
¿Qué ocurrió?
Un hombre de 45 años con ansiedad crónica, tratada con alprazolam tres veces al día, acudió al hospital tras una reunión en la que tomó unas 6 cervezas y luego su medicación habitual. Fue su pareja quien notó que estaba demasiado somnoliento, desorientado y no podía caminar bien.
Exploración médica detallada
Al llegar al hospital, el equipo médico observó lo siguiente:
• Estado de conciencia: respondía a estímulos verbales, pero con lentitud. No recordaba con claridad lo que había hecho, y parecía confundido. (Escala de Glasgow: 13/15)
• Lenguaje: hablaba con dificultad, arrastrando las palabras, como si estuviera muy somnoliento o embriagado (disartria).
• Marcha: al intentar caminar, se tambaleaba y no podía mantener el equilibrio. Necesitaba ayuda para mantenerse de pie (marcha atáxica).
• Presión arterial: 105/65 mmHg (ligeramente baja pero sin riesgo inmediato).
• Frecuencia respiratoria: 12 respiraciones por minuto, dentro de límites normales pero en el rango más bajo.
• Oxigenación (saturación de oxígeno): 96%, lo que indica que, pese a los síntomas, no había falta de oxígeno en sangre.
• Temperatura y frecuencia cardíaca: normales.
Tratamiento y evolución
El paciente fue atendido en el área de observación durante 18 horas. Se le administraron líquidos por vía intravenosa para mantenerlo hidratado y se le dio oxígeno a bajo flujo durante las primeras horas. No se requirió usar medicamentos específicos para revertir el efecto del alprazolam. Durante su estancia, fue recuperando el estado de conciencia, mejoró su forma de hablar y pudo volver a caminar sin ayuda. Fue dado de alta al día siguiente, con indicaciones claras: no volver a mezclar alcohol con su tratamiento, y seguimiento con el equipo de salud mental.
¿Por qué es importante este caso?
Este tipo de intoxicación es más común de lo que parece. Muchas personas no saben que el alcohol potencia el efecto de ciertos medicamentos como los ansiolíticos. El resultado puede ser muy grave, especialmente en personas que ya tienen problemas emocionales o que consumen alcohol de forma habitual. Aunque este paciente se recuperó bien, no todos corren con la misma suerte.
Conclusiones para el lector
No combines medicamentos para la ansiedad con bebidas alcohólicas, aunque te sientas bien o tomes “pocas copas”.
Los efectos pueden ser impredecibles: desde somnolencia leve hasta coma.
Habla siempre con tu médico sobre qué puedes o no puedes consumir mientras tomas medicación.
En caso de duda o si notas síntomas extraños, acude al hospital.
Palabras clave:
Alprazolam, alcohol, intoxicación, ansiedad, medicamentos y alcohol, depresión del sistema nervioso central.
AUTORES:
María Elena Rosario Ubiera. Médico Cruz Roja, Zaragoza.
María Reyna Flores Ponce. MIR Neumología. Hospital Royo Villanova, Zaragoza.
Omar Andrés Santofimio Bernal. MIR Medicina Familiar y Comunitaria. Hospital Royo Villanova, Zaragoza.
Laura Gil Rivas. MIR Ginecología y Obstetricia. Hospital San Jorge, Huesca.
María Pérez Millán. FEA Aparato Digestivo. Hospital Royo Villanova, Zaragoza.
Irene Coronado Lazcano. MIR Ginecología y Obstetricia. Hospital Infanta Cristina, Parla, Madrid.