La mayoría de los pacientes diagnosticados como diabéticos tipo 2 tienen sobrepeso, siendo el factor no farmacológico más asociado con un buen control glucémico la pérdida de peso.
Las recomendaciones de dieta y el ejercicio en pacientes diabéticos se basan fundamentalmente en:
• Lograr un peso saludable.
• Evitar complicaciones cardiovasculares.
• Lograr un control mejorado del azúcar.
La pérdida de peso mejora el control de otros factores de riesgo cardiovascular como la HTA, los niveles séricos de colesterol y triglicéridos; pudiendo aumentar el colesterol HDL (con demostrado efecto cardioprotector).
Los pacientes diabéticos con obesidad o sobrepeso, deben incluir un plan de comidas personalizado para asegurar el déficit calórico. Existe fuerte evidencia científica que sustenta que: la pérdida de peso moderada (a partir del 7,0%) y sostenida en el tiempo frena la progresión de la prediabetes a la diabetes.
Los objetivos del tratamiento médico nutricional irán enfocados a intentar modificar actitudes y estilos de vida que mejoren la calidad de vida. Para ello los profesionales:
1. Promoverán y apoyarán hábitos alimenticios saludables con intención de mejorar la salud en general, lograr objetivos apropiados para el peso corporal, los niveles de lípidos, la presión arterial y el glicemia en sangre. Así mismo, intentarán retrasar o prevenir los síntomas de las complicaciones de la diabetes.
2. Satisfarán las necesidades nutricionales individuales en función de las preferencias del paciente, sin olvidar los rasgos y características culturales, la educación sanitaria y las habilidades del paciente.
3. Mantendrán “el placer de comer” mediante el envío de mensajes que no juzguen negativamente las elecciones de alimentos, sino que limiten las elecciones de los alimentos calificados como perjudiciales o poco apropiados.
4. Brindarán herramientas prácticas para desarrollar hábitos alimenticios saludables.
Recomendaciones dietéticas para las personas con DM tipo 2
• Se recomienda una dieta hipocalórica junto con un programa de ejercicio adecuado para la pérdida de peso (>5%) en adultos con sobrepeso, obesos, prediabéticos y DM tipo 2.
• La alimentación debe ser equilibrada y variada, recomendándose ingerir alimentos ricos en ácidos grasos omega 3 de cadena larga (nueces, semillas variadas y pescado azul).
• No se requieren suplementos con vitaminas, minerales o antioxidantes; ni tampoco con omega 3 exógenos. En pacientes con dietas vegetarianas o veganas, sí se recomienda añadir suplementos de micronutrientes tras ser valorados por un profesional médico.
• Se recomendará a los pacientes elegir alimentos ricos en fibra, como vegetales crucíferos, verduras de hoja verde, legumbres, cereales integrales y productos lácteos.
• Se deben evitar las fuentes de alimentos con azúcar añadida y las bebidas azucaradas para controlar el peso, reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular y enfermedad del hígado graso.
• Se aconseja ingerir > 40g/día de fibra, habiéndose demostrado que las dietas ricas en fibra disminuyen el riesgo cardiovascular y los eventos asociados a éste.
• El consumo de alcohol será limitado, haciendo diferencias entre hombres y mujeres: 2 unidades/día en varones y 1 unidad/día en mujeres.
• La ingesta de sal será reducida, siempre por debajo de 2,3 gramos/día. El consumo será aún más restringido, recomendando que sea nulo, en aquellos pacientes que sufran de diabetes e HTA.
• Siempre deben tenerse en cuenta las calorías totales y los objetivos metabólicos. No existiendo un reparto calórico ideal entre hidratos de carbono, lípidos y proteínas en personas con DM tipo 2. Los planes alimentarios siempre deben ser individualizados.
Ejercicio en personas diabéticas
La actividad aeróbica estructurada y controlada, tal como ejercicios sencillos de movimiento (como pasear o pedalear en una bicicleta) o de fuerza (ejercicios con pesas o bandas elásticas) han demostrado:
• Ser seguros para los pacientes con DM tipo 2.
• Disminuir la mortalidad cardiovascular.
• Reducir el peso y la circunferencia abdominal.
• Disminuir la hemoglobina glicosilada.
• Un descenso de los niveles de azúcar y colesterol en sangre.
A los pacientes diabéticos se les recomienda realizar ejercicios aeróbicos y de resistencia de forma regular, marcándose como objetivo un mínimo de 30 minutos al día. Se deben establecer metas graduales hacia el cumplimiento de los objetivos recomendados, disminuyendo progresivamente el tiempo de inactividad. Los ejercicios de flexibilidad y de equilibrio son especialmente importantes en adultos mayores con diabetes para mantener el equilibrio.