En épocas de calor y recreación acuática, es común ver algunas prácticas que, aunque extendidas, no siempre son las más adecuadas desde el punto de vista sanitario. Una de ellas es el uso de ropa interior (calzoncillo) debajo del bañador masculino. Aunque muchos hombres lo hacen por costumbre, pudor o comodidad, esta práctica puede tener consecuencias negativas para la salud.
A continuación, explicamos por qué los profesionales sanitarios no recomiendan usar calzoncillo bajo el bañador.
- Riesgo de infecciones por humedad prolongada
La ropa interior, especialmente si es de algodón, retiene la humedad durante más tiempo que los tejidos sintéticos de secado rápido con los que se fabrican los bañadores. Esto crea un ambiente ideal para la proliferación de:
- Hongos (como la tiña inguinal o candidiasis).
- Bacterias que pueden provocar dermatitis, irritaciones o mal olor.
- Infecciones del tracto urinario (menos frecuente, pero posible si hay una mala higiene post baño).
Recomendación sanitaria: Evitar el uso de ropa interior debajo del bañador para reducir la exposición prolongada a la humedad en la zona genital.
- Irritación de la piel y rozaduras
La doble capa de tela (calzoncillo + bañador) puede causar:
- Rozaduras inguinales por el roce constante al nadar o caminar.
- Dermatitis por fricción.
- Obstrucción de la ventilación natural de la piel.
Además, si el bañador tiene una malla interna (que cumple función de soporte y ventilación), el calzoncillo interfiere con su función, haciendo que la zona se recaliente y sude más.
- Higiene del agua en piscinas y balnearios
Desde una perspectiva comunitaria, el uso de ropa interior en piscinas puede ser un problema:
La ropa interior no está diseñada para usarse en el agua y puede liberar fibras o residuos, afectando la calidad del agua.
Si no está bien lavada, puede transportar restos de orina, sudor, detergentes o bacterias, que se transfieren al agua.
Importante: Muchas piscinas públicas prohíben expresamente el uso de ropa interior bajo el bañador por razones de higiene colectiva.
- Materiales no aptos para ambientes húmedos
Los calzoncillos tradicionales están fabricados con materiales absorbentes, como algodón o mezcla con elastano. Estos:
- Se empapan fácilmente.
- No permiten un secado rápido.
- Pueden generar sensación de frío al salir del agua, aumentando el riesgo de resfriados o infecciones urinarias.
En cambio, los bañadores están confeccionados con tejidos como poliéster o nailon, que permiten:
- Secado rápido.
- Transpiración.
- Menor acumulación de bacterias.
¿Qué hacer si el bañador no tiene forro?
En caso de que el bañador no incluya la malla interior, las alternativas recomendadas son:
Usar ropa interior de natación: prendas especialmente diseñadas para mojarse, transpirables y de secado rápido.
Optar por bañadores con short de compresión interior (liner), disponibles en el mercado actual.
Si se desea mayor sujeción, se puede usar un slip de natación debajo, diseñado para el medio acuático.
Conclusión sanitaria
Desde el punto de vista de la salud, la mejor opción es NO usar ropa interior debajo del bañador. Esta práctica aumenta el riesgo de infecciones, irritaciones y problemas de higiene tanto individual como colectiva.
Recomendaciones clave
✔ Usar bañadores con forro interno.
✔ Evitar prendas de algodón en ambientes húmedos.
✔ Cambiarse la ropa mojada lo antes posible.
✔ Secar bien la zona genital tras el baño.
✔ Consultar con un médico si aparecen irritaciones persistentes o infecciones.
AUTORES
Cristian Aguirre Pérez, Natalia Romero Aldave, Imanol Gil Goñi, Jorge Montero Herrero, Rosario Pérez Portilla y Miren Montoya Dufur.
TCAE en Hospital Universitario de Navarra