El parto prematuro se produce cuando las contracciones regulares provocan la apertura del cuello del útero después de la semana 20 y antes de la semana 37 del embarazo.
El parto prematuro puede producir un nacimiento prematuro. Cuanto antes ocurra el nacimiento prematuro, mayores serán los riesgos para la salud de tu bebé. Muchos bebés prematuros requieren ingreso en la unidad de cuidados intensivos neonatales. Los recién nacidos prematuros también pueden tener secuelas a largo plazo.
No está clara la causa del inicio prematuro del trabajo de parto. Hay algunos factores de riesgo que pueden aumentar la probabilidad de un parto prematuro.
Factores de riesgo
El parto prematuro puede afectar a cualquier gestación. Algunos de los factores de riesgo conocido son:
• Trabajo de parto prematuro o nacimiento prematuro anterior.
• Gestación múltiple.
• Cuello del útero acortado.
• Alteraciones uterinas como polimiomatosis uterina. Útero bicorne o septo.
• Tabaquismo o consumo de drogas.
• Infecciones del líquido amniótico y del tracto genital inferior.
• Algunas afecciones crónicas, como hipertensión arterial, diabetes, enfermedades autoinmunes.
• Polihidramnios (aumento líquido amniótico).
• Sangrado vaginal durante el embarazo.
• Defecto congénito del feto.
• Un intervalo de menos de 12 meses – o de más de 59 meses – entre embarazos.
• Edad materna.
Causas
Tradicionalmente, las causas de parto prematuro se han agrupado en tres grandes grupos:
• Iatrogénico (por indicación médica, el parto debe ocurrir antes del término del embarazo, por ejemplo: patología materna).
• Secundario a Rotura Prematura de Membranas (RPM).
• Idiopático (sin causa aparente).
Síntomas
Los signos y síntomas del parto prematuro comprenden:
• Sensaciones regulares o frecuentes de endurecimiento del abdomen (contracciones).
• Dolor sordo, leve y constante en la espalda.
• Sensación de presión en la pelvis o en la región inferior del abdomen.
• Cólicos leves.
• Manchado o sangrado vaginal leve.
• Rotura prematura de las membranas: pérdida continua de líquido, en forma de chorro o goteo.
• Cambio en el tipo de flujo vaginal (acuoso, con aspecto de mucosidad o sanguinolento).
Complicaciones
Las complicaciones del trabajo de parto prematuro incluyen el nacimiento de un bebé prematuro. Esto puede plantear una serie de problemas como bajo peso al nacer, dificultades respiratorias, órganos subdesarrollados, problemas neurológicos y problemas de visión. Los niños que nacen prematuramente también tienen un mayor riesgo de parálisis cerebral, problemas de aprendizaje y de comportamiento.
Prevención
• Recibir atención médica prenatal de manera regular. Las consultas prenatales pueden ayudar a diagnosticar posibles factores de riesgo. Si tienes antecedentes de parto prematuro se realizan visitas con mayor frecuencia durante el embarazo.
• Dieta saludable. Algunas investigaciones sugieren que una dieta alta en ácidos grasos poliinsaturados se asocia con un menor riesgo de nacimiento prematuro. Los ácidos grasos poliinsaturados se encuentran en los frutos secos, las semillas, el pescado y los aceites de las semillas.
• Evitar las sustancias de riesgo. Tabaco, alcohol y otras drogas
• Técnicas de reproducción asistida. Evitar embarazos gemelares.
• Tratar las afecciones crónicas. La diabetes, la hipertensión y la obesidad, aumentan el riesgo de parto prematuro.
AUTORES
Marta Castellà Segarra, Marta Benito Vielba, Victoria Pallarés Arnal, Verónica Gómez García, Ligia Gil Melgosa, Cristina Luna Álvarez.
Facultativos Especialistas Ginecología y Obstetricia. Hospital de Barbastro. Huesca