Las patologías del pie que necesitan un tratamiento requieren de una clínica que priorice la calidad y la excelencia, y que cuente con los últimos avances tecnológicos. Una de las unidades de cirugía de pie y tobillo más avanzadas de Pamplona se encuentra en la Clínica Podológica Ayesa.
El objetivo de este centro médico, especialista en cirugía de mínima incisión, es aportar soluciones definitivas a los que no ha dado respuesta el tratamiento conservador.
Los problemas más comunes que trata la Clínica Podológica Ayesa son juanetes, deformidades digitales como dedos en garra, mazo o martillo y helomas.
Si un tratamiento conservador no da respuesta, estas patologías tienen el tratamiento quirúrgico como la solución más acertada y efectiva.
En este tipo de cirugías de mínima incisión que realiza Clínica Podológica Ayesa, el paciente se opera sin necesitar un ingreso hospitalario y puede ir a casa apoyando el pie el mismo día de la intervención, utilizando un calzado post-quirúrgico que se retirará a las 3 ó 4 semanas.
A continuación, Javier Ayesa, responsable de Clínica Podológica Ayesa, detalla las patologías más comunes que resuelve con la cirugía de mínima incisión, así como sus síntomas y sus causas. Son síntomas que debemos de conocer para ponernos en manos de expertos como Javier Ayesa y resolver de forma definitiva el problema y evitar que empeore.
Juanetes
“Un juanete es una protuberancia ósea que se forma en la articulación en la base del dedo gordo del pie. La punta de ese dedo se desplaza hacia los dedos más pequeños, apiñándolos. Esto también fuerza que la articulación en la base del dedo gordo sobresalga”, explica Javier Ayesa.
Deformidades digitales
“Los dedos en garra, mazo o martillo son unas deformidades que se producen en los dedos pequeños de los pies. Estos cuatro dedos están formados por 3 huesos (a diferencia de los dos huesos que forman el dedo gordo) y por varias articulaciones (que son la unión de dos huesos)”, señala Javier Ayesa.
Helomas
“Los helomas plantares son una hiperqueratosis localizada, es decir, una lesión con bordes bien definidos que crece hacia capas más profundas de la piel del pie,
a diferencia de las durezas, que son más superficiales”, describe Javier Ayesa.