Se considera un accidente de trabajo o laboral, a toda lesión que sufra un trabajador/a a causa o con ocasión del trabajo, y que le produzca incapacidad o muerte. Se considerarán también como accidentes de trabajo las lesiones que sufra el trabajador al ir o volver del lugar de trabajo (accidentes in itinere).
Es fundamental asegurar que en todos los lugares de trabajo existe un plan de emergencia, cuyos objetivos fundamentales serán:
- Tratar de minimizar los efectos que sobre las personas y los bienes se puedan derivar.
- Garantizar la evacuación segura de sus ocupantes, si fuese necesario.
¿Qué hago ante un accidente en el trabajo?
Como medidas básicas, siempre que presenciemos o nos veamos expuestos a un accidente en nuestro puesto de trabajo deberemos:
- Priorizar la atención de las personas accidentadas.
- Detener la maquinaria y/o equipos implicados, administrando los primeros auxilios si se dispone de formación para ello.
- Si fuera necesario la evacuación del herido.
- Acordonar la zona y calmar a los demás trabajadores que pudieran verse implicados.
Medidas especiales ante situaciones concretas
No todos los accidentes de trabajo son de la misma índole, por lo que deberemos reaccionar de manera diferente en función de cuál sea el peligro existente para prevenir y disminuir las posibles lesiones.
Quemaduras:
- Eliminar la causa: apagar las llamas y nunca quitar la ropa que la persona lleve pegada al cuerpo.
- En quemaduras por productos corrosivos, aplicar agua con abundancia con ducha o lavaojos (si el agua es compatible con el producto corrosivo).
- Evacuar lo antes posible al centro hospitalario aportando información de la causa de la quemadura.
Intoxicaciones Agudas:
- Por vía respiratoria (inhalación de gases, productos químicos…):
– Separar al accidentado de la fuente de emisión y llevarlo a un lugar seguro y ventilado.
– Cortar la generación del contaminante.
– Recabar información sobre el origen de la intoxicación.
- Por vía digestiva:
– Conocer el producto ingerido y los efectos tóxicos.
– Evacuar lo antes posible al centro hospitalario aportando información de sustancias ingeridas.
- Por vía cutánea:
– Normalmente lavar con abundante agua (ver ficha de seguridad).
Vertidos, derrames y fugas:
- Actuar rápidamente y aislar la zona.
- Cerrar válvulas y llaves para detener el vertido.
- Recoger el producto derramado evitando su evaporación y daños sobre las instalaciones, utilizando el absorbente indicado y guardar éste en un recipiente estanco.
- No verter a la red de desagües sustancias peligrosas o contaminadas.
- Emplear equipos de protección personal adecuados.
Incendios:
- Durante un incendio el humo puede provocar la asfixia de las personas que se encuentren en las instalaciones.
- El humo tiende a subir hacia arriba. Intentar no respirar el humo, agacharse e intentar bajar a pisos inferiores.
- Si quedamos encerrados entre las llamas ya que las vías de evacuación están ardiendo o hay mucho humo, y no es posible salir por una ventana, ya que el piso es muy elevado, es preferible entrar en un cuarto que no haya fuego y encerrarse, cerrando bien puertas y ventanas y tapando con lo que tengamos la ranura de la puerta, para que no entre humo.
Recuerde que…
El empresario debe elaborar el Plan de Emergencia y evacuación interno de la empresa o el Plan de Autoprotección si es obligatorio, según el tipo de empresa y usted, como trabajador, tiene que conocer el contenido de dicho plan y actuar en consecuencia ante una situación de emergencia.
Cuando descubra una situación de emergencia avise de la misma al responsable. Si tiene conocimientos y autorización actúe sobre la misma.