En 2007 ha entrado en vigor el Segundo Plan de Salud Laboral de Navarra 2007-2012, firmado por el Gobierno de Navarra, la Confederación de Empresarios y los sindicatos UGT y CCOO. El documento, que consolida y amplía la experiencia del primer plan, se articula en torno a siete líneas estratégicas, cinco troncales y dos transversales, y define el concepto de salud laboral desde una perspectiva amplia que, además de la prevención de las situaciones que puedan provocar una mala salud, incluye la promoción de la buena salud de los trabajadores. Los planes de Salud Laboral establecen políticas globales de seguridad en el trabajo y son una de las principales herramientas con las que cuenta la Administración para disminuir la siniestralidad en este ámbito. Además, sirven para organizar la gestión de los esfuerzos y recursos que la sociedad destina a evitar los daños profesionales y mejorar la calidad de vida de los trabajadores. El principal reto al que se enfrenta este Segundo Plan de Salud Laboral es conseguir que la población se conciencie del riesgo que unas condiciones de trabajo inadecuadas tienen para la salud de los trabajadores y las organizaciones.
Los recursos preventivos han mejorado en los últimos diez años la calidad de la salud laboral, pero todavía queda un largo camino que recorrer, ya que la aplicación de la prevención aun no cubre las necesidades reales de las empresas. Los cambios que ha experimentado la sociedad del trabajo, tanto demográficos como sociológicos; los nuevos modelos de organización de la actividad; la globalización de la economía y el desarrollo tecnológico han provocado la aparición de nuevos modelos laborales. Los altos ritmos de trabajo, las jornadas prolongadas, la rotación y la organización por turnos han supuesto un aumento de la carga laboral, tanto física como mental. Y esto ha influido en la aparición de lesiones y en el aumento de la siniestralidad. Analizar y anticiparse a estos riesgos es la mejor forma de evitar que se den situaciones no deseables para ninguno de los implicados.
Objetivos del plan
El Segundo Plan de Salud Laboral de Navarra se articula en torno a siete líneas estratégicas, de las cuales cinco son troncales y dos son transversales: Las líneas estratégicas troncales son las siguientes:
- Luchar activamente contra la siniestralidad de los Accidentes de Trabajo.
- Intensificar la vigilancia y control de las empresas navarras en el cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
- Atender preferentemente a los riesgos emergentes y colectivos específicos.
- Estimular la participación activa de las asociaciones empresariales, sindicales y representantes de los trabajadores en la mejora continua de la prevención de riesgos laborales.
- Mejorar la vigilancia de la salud y disminuir la subdeclaración e impulsar la prevención de las enfermedades profesionales.
Las dos líneas estratégicas transversales han sido concebidas para apoyar a las cinco troncales, y son las siguientes:
- Desarrollar acciones de investigación, formación y comunicación en Prevención de Riesgos Laborales.
- Crear un Observatorio Navarro de Salud Laboral y Condiciones de Trabajo que monitorice y determine las acciones de prevención prioritarias en las que hay que intervenir.
Estas siete líneas de trabajo completan el marco de la Salud Laboral y la Prevención de Riesgos Laborales en toda su extensión y permiten actuar en todos los campos de la actividad laboral. Su objetivo final es el de disminuir la siniestralidad y mejorar la seguridad y la salud en el trabajo de la población navarra.
El concepto de Salud Laboral
El concepto de Salud Laboral definido por el Segundo Plan de Salud Laboral de Navarra asume que las causas de los problemas de salud son múltiples y las respuestas, en consecuencia, deben ser interdisciplinares. Asimismo, reconoce la necesidad de incorporar la experiencia de los propios trabajadores en la solución de los problemas, ya que es un elemento esencial para garantizar la efectividad y la eficiencia de las intervenciones. Por último, el plan defiende que la salud laboral incluye, además de la prevención de riesgos laborales, la promoción de la salud de los trabajadores.
Empleando una perspectiva amplia para analizar la realidad del mercado laboral, el nuevo Plan deja claro que mejorar la salud laboral es un objetivo que incumbe a todos los actores implicados en el proceso: los empresarios, los trabajadores y la Administración, como garantía de derecho a la protección de la salud.