La infección del tracto urinario (ITU) se considera todo aquel proceso caracterizado por colonización y multiplicación microbiana, habitualmente bacteriana, en el Tracto Urinario. Es la causa más frecuente de consulta en Atención Primaria en mujeres. Afecta aproximadamente a 3.000.000 pacientes al año en España.
Cuando se producen dos o más episodios de infección del tracto urinario en los últimos seis meses o tres o más episodios en el último año se denomina ITU de repetición o recurrente.
Factores de riesgo
Son múltiples, pero los más importantes son: edad, número de infecciones urinarias previas, relaciones sexuales, embarazo, litiasis y presencia de cistocele.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la infección urinaria recurrente es clínico, mediante anamnesis y exploración física. Es frecuente el síndrome miccional (disuria, tenesmo y polaquiuria) pudiendo ir acompañado de hematuria macro o microscópica y/o dolor suprapúbico. Deberá realizarse urocultivo en todos los pacientes y en el sedimento urinario es habitual encontrar piuria, microhematuria y/o nitritos positivos y esterasa leucocitaria positiva.
La realización de cistoscopia y/o exploraciones radiológicas del tracto urinario superior no se recomiendan de rutina para la evaluación de las mujeres con infección urinaria de repetición.
¿Cómo prevenirla?
• Incrementar ingesta de líquidos con el fin de diluir y eliminar con micciones frecuentes las bacterias que alcancen la vejiga.
• Micción postcoital.
• Correcta higiene genital, limpieza anal en sentido anteroposterior.
• Corrección del estreñimiento y regular el tránsito intestinal, lo que disminuye la concentración del inóculo bacteriano rectal.
• Cambio de método anticonceptivo, en caso de emplear como método el diafragma o espermicidas.