Si no necesito gafas, ¿tengo buena visión?

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La neurociencia ha demostrado que somos “seres visuales”. Para abordar con mayores probabilidades de éxito las dificultades de aprendizaje, resulta imprescindible realizar un buen estudio de la visión. Cuando hablamos de visión no estamos hablando sólo de la vista (agudeza visual).

La visión es el conjunto de habilidades para identificar, interpretar y comprender lo que vemos.
Una buena visión, además de permitirnos ver un 100%, nos permite dar significado y comprender lo que vemos.
El 80% de nuestro cerebro funciona, de una forma u otra, relacionado con la visión.

Habilidades visuales imprescindibles para el aprendizaje

1. Agudeza visual.
2. Control de los movimientos oculares.
3. Habilidad del enfoque.
4. Coordinación ocular.
5. Coordinación ojo-mano.
6. Conceptos direccionales.
7. Percepción visual de forma.
8. Memoria visual.
9. Visualización.

Los movimientos oculares

Permiten el movimiento rápido y preciso que se necesita para una buena lectura, para mirar de la pizarra al texto y unos seguimientos adecuados para practicar deportes.

Señales que indican unos malos movimientos oculares:
• Necesidad de usar el dedo para no perderse en la lectura.
• Dificultades para copiar.                                                                                                                                                          • Necesidad de leer el texto varias veces.
• Omisión de palabras al leer.
• Problemas para golpear y coger una pelota.

Señales de un mal enfoque:
• Visión borrosa.
• Problemas para copiar de la pizarra.
• Cansancio visual al leer y escribir.
• Necesidad de frotarse los ojos.
• Baja comprensión de lo leído.
• Evitar las tareas.

Señales de una mala binocularidad:
• Ojo torcido.
• Supresión de la visión.
• Visión doble.
• Dificultad para ver con profundidad.
• Cansancio visual.
• Períodos de atención reducidos.
• Pobre comprensión lectora.
• Evitar la tarea de cerca.
La coordinación ojo-mano es muy importante para que la escritura no necesite un esfuerzo extra, para expresar adecuadamente ideas por escrito y también para un eficaz rendimiento en los deportes.Los conceptos direccionales (dirección visuo-espacial) aportan una buena comprensión de nuestro propio cuerpo, lo que nos ayudará a poder realizar buenos juicios espaciales y a integrar la lateralidad (direccionalidad). En caso de no tener bien desarrollada esta capacidad, podemos invertir letras, palabras y números, tanto en la lectura como en la escritura.
La Memoria Visual y Visualización es la capacidad para formar y retener imágenes visuales. Y ello nos prepara para una buena comprensión lectora y conseguir la máxima información en el menor tiempo posible.

Señales de una mala memoria visual y visualización:
• Problemas al copiar.
• Dificultad para recordar lo que vemos o leemos.
• Pobre comprensión lectora.
• Deletreo en la lectura.
Es muy frecuente pensar que un niño no tiene problemas visuales porque le han mirado la agudeza visual de lejos, todo está bien y no necesita gafas. Pero un examen visual completo va más allá de agudeza visual y refracción.

Aquí os dejamos una lista de señales que puede tener un niño que presenta problemas de aprendizaje relacionados con la visión.
1. Se acerca mucho al texto para leer.
2. Se frota los ojos a menudo.
3. Ve doble o borroso al leer.
4. Se queja de dolores de cabeza al finalizar el día.
5. Mueve la cabeza cuando lee o escribe.
6. Acompaña la lectura con el dedo.
7. Confunde letras o palabras.
8. Invierte letras o palabras.
9. Se salta, relee u omite letras o renglones.
10. Vocaliza cuando lee en voz baja.
11. Dificultad de concentración y tiene cortos períodos de atención.
12. Requiere una cantidad excesiva de tiempo para acabar las tareas.
13. Es lento en la lectura.
14. Baja comprensión lectora.
15. No le gusta leer ni escribir.
16. Mala coordinación general.