La insuficiencia venosa es una enfermedad muy frecuente, y, dentro de ella, las varices son la manifestación más habitual. Se trata de una dilatación anormal y permanente de las venas del sistema venoso superficial. Si bien se trata de un problema benigno y con una progresión lenta, dejado a su evolución natural puede acarrear complicaciones muy graves, dolorosas y de difícil curación, como son las úlceras venosas.
Aunque el tratamiento quirúrgico de las varices es efectivo, no deja de ser un procedimiento agresivo que requiere una recuperación relativamente larga hasta que se puede volver a hacer una vida normal. Además, en determinadas circunstancias, como las anteriormente citadas úlceras venosas, no se puede llevar a cabo por el riesgo de contaminación de las heridas quirúrgicas. Se trata, por tanto, de un círculo vicioso: no se pueden operar las varices porque hay una úlcera; y la úlcera se va a mantener en el tiempo mientras no se eliminen las varices.
Reducción de la hipertensión venosa mediante esclerosis con microespuma
Ante la presencia de una úlcera venosa, la única posibilidad de curación estriba en la reducción de la hipertensión venosa. Dado que la cirugía no es una opción, l a mejor alternativa es el tratamiento mediante esclerosis con microespuma. Se localiza mediante ecografía la vena afectada y se esclerosa la vena causante de que la úlcera venosa no cure. En poco tiempo la úlcera empieza a cicatrizar hasta su total resolución. Y esto sin necesidad de anestesia, ingresos, bajas, cicatrices, etc.
Éxito asegurado
A la esclerosis con microespuma sólo se le puede buscar una “pega”, que consiste en que es un tratamiento del que desconocemos el número de sesiones que serán necesarias hasta tratar todos los segmentos venosos afectados. El éxito está asegurado, pero el número de sesiones es impredecible.
El catéter Clarivein®
Esta pequeña “limitación” se soluciona con una innovación tecnológica, que es el catéter Clarivein®. Mediante la inserción ecoguiada de un pequeño catéter, se pueden eliminar la mayor parte de las varices en una sola sesión. Sin anestesia o sólo con anestesia local, y mediante control ecográfico, se inserta un catéter que esclerosa las venas combinando un efecto mecánico y químico. Tiene todas las ventajas de la esclerosis con microespuma, pero de una forma mucho más inmediata.
En definitiva, tanto mediante la esclerosis con microespuma como mediante la técnica Clarivein®, tenemos la posibilidad de tratar todo tipo de varices de una forma segura, no agresiva y totalmente eficaz. Y como hemos comentado, son la única opción terapéutica en presencia de una úlcera venosa.