La enfermedad boca-manos-pies, es una enfermedad exantemática, típica de la infancia, completamente benigna y altamente contagiosa, ocasionada por los virus Coxsackie A16 y enterovirus 71 principalmente. Consiste en fiebre, exantema pápulo-vesicular en las manos, los pies y un enantema ulceroso en la boca.
¿Como se transmite?
El virus se extiende por trasmisión horizontal de niño a niño, por contacto directo con secreciones nasales, orales, material fecal, gotas aerolizadas, en una ruta fecal-oral u oral-oral, y a través de objetos contaminados.
Síntomas
Los signos habituales de la enfermedad son la aparición de ampollas en la palma de las manos y planta de los pies, y lesiones vesículo-ulcerativas de 2 a 6 mm de diámetro en la boca y los síntomas son: fiebre, odinofagia y ocasionalmente rinorrea, vomito, diarrea, mialgias y dolor de cabeza, es decir síntomas similares a un resfriado.
Las lesiones bucales preceden a las lesiones cutáneas y generalmente se observan en estadio de ulceración.
En la mayoría de las ocasiones las lesiones se encuentran limitadas a las regiones referidas, pero otras veces las superan y pueden dar casos más extendidos, sin aumentar esto la gravedad del proceso.
La enfermedad desaparece en un margen de 7 a 10 días y no todos los pacientes llegan a manifestar el cuadro clínico completo.
Diagnóstico
El diagnóstico es generalmente clínico, basándose en la historia de la enfermedad y las características clínicas de las lesiones.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico antiviral, lo indicado es el alivio sintomático para este tipo de infección.
El tratamiento de la enfermedad es sintomático y se basa en analgésicos y antipiréticos, así como en la aplicación de anestésicos tópicos y soluciones antisépticas o antibióticos tópicos, para evitar las sobreinfecciones bacterianas.
Se recomienda al enfermo ingerir muchos líquidos, evitar alimentos muy picantes, ácidos o duros. Se pueden utilizar enjuagues inespecíficos para aliviar el malestar bucal.
Prevención
Es muy importante seguir procedimientos estrictos de lavado de manos e higiene personal y evitar compartir objetos o utensilios.
La persona con enfermedad de boca mano pie es potencialmente contagiosa durante los síntomas iniciales y hasta que las lesiones vesículo-ampollares de la piel desaparezcan. El virus se sigue eliminando por la heces durante varias semanas.