La edad mayor, la vejez, es una etapa de la vida. Es deseable llegar a ella. Si se alcanza con un estado de salud razonable y con unos recursos económicos y familiares suficientes para vivir dignamente y con apreciable autonomía, la vejez puede ser un tiempo gozoso. Pero la realidad de esta etapa de vida depende mucho del lugar donde vivas, la capacidad económica que tengas, si eres mujer, etc.
De los 962 millones de personas mayores de 60 años, 602 millones viven en países empobrecidos. En 2050 se espera que ese grupo supere los 1.670 millones de personas. El envejecimiento de la población en esos países se está produciendo con mucha más rapidez que en las regiones más ricas, lo que hará, según la OMS, que tengan mucho menos tiempo para prepararse para afrontar las consecuencias.
Todo esto tiene que ver con el aumento de la esperanza de vida. La media en nuestro planeta es ahora de 70 años, aunque todas las proyecciones indican que en el periodo 2045-2050 alcanzará los 83. Este indicador es precisamente uno de los que más claramente nos muestran las diferencias entre países. Si has nacido en España, te puedes considerar una persona con suerte, pues tendrás muchas posibilidades de llegar a los 82,8 años. Sin embargo, si naces en Bolivia tu esperanza de vida se reducirá hasta los 70,7 años y en República Democrática del Congo es probable que no superes los 59,8.
La inequidad en salud puede estar presente en todas las edades de la vida humana, pero tanto en la infancia como cuando envejecemos, somos más vulnerables. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 48% de las personas más mayores en el mundo no recibe una pensión de jubilación. Pero, además, la cobertura no es adecuada para muchas de las personas que la reciben. Como consecuencia, la mayoría de las personas de edad en el mundo, carecen de ingresos seguros y no pueden jubilarse con dignidad y sin caer en la pobreza, por lo que se ven abocados a seguir trabajando el mayor tiempo posible, en ocupaciones con frecuencia mal pagadas y en condiciones precarias.
Protección a la pobreza extrema
La OMS pronostica que de aquí a 2050 la cantidad de personas ancianas que no pueden valerse por sí mismas se multiplicará por cuatro en los países empobrecidos. Existen dos estrategias clave para afrontar estas cifras; por un lado la puesta en marcha de sistemas de pensiones básicas pagadas por el Estado para proteger a las personas mayores de la pobreza extrema y, por otro, el refuerzo de los sistemas públicos de salud desde el enfoque de la Atención Primaria, es decir, garantizando los cuidados más básicos.
No debemos olvidar que incluso en los países empobrecidos la mayoría de las personas mayores muere a causa de enfermedades no transmisibles, como son las cardiopatías, el cáncer y la diabetes. En este sentido, es importante poner el acento en políticas públicas que ayuden a prevenir enfermedades crónicas y fomenten la implicación activa de estas personas, pues el hecho de que podamos envejecer bien depende, y mucho, de nuestro estilo de vida y los recursos a los que hayamos tenido acceso durante nuestra vida.
medicusmundi trabaja para hacer real y efectivo el derecho a la salud de las personas más vulnerables, entre las que se encuentran las personas mayores. La mejor manera de conseguir salud para todas las personas es construir sistemas públicos de salud fuertes, que no dejen a nadie atrás. Contribuimos a la formación del personal sanitario, el verdadero corazón que hace funcionar al sistema de salud, también mejoramos infraestructuras y equipamientos. Trabajamos para garantizar la financiación adecuada de los servicios de salud mediante el fomento de mutualidades de salud para que nadie caiga en la pobreza por tener que pagarse los gastos sanitarios. Y tenemos muy presente que salud es mucho más que atención sanitaria, por lo que también apoyamos acciones encaminadas a mejorar aquellos aspectos que también influyen sobre nuestra salud, como pueden ser el agua, la alimentación, la vivienda o la pobreza, el mayor determinante de la salud en todas las edades. Conoce más de nuestra labor en www.lasaludunderecho.es