El cáncer de próstata es el segundo más frecuente en el mundo entre los varones, con aproximadamente 680.000 nuevos casos al año suponiendo 11,7% de todos los tumores masculinos. En Europa, el cáncer de próstata es ya la neoplasia sólida más frecuente superando al cáncer de pulmón y de recto.
Factores de riesgo
• La edad es uno de los principales factores de riesgo asociados al cáncer de próstata. La mayoría de los casos se diagnostican entre los 60 y los 80 años, con pico máximo entre los 70 y los 75, aunque hay un número significativo de casos desde los 50 años. Se considera un tumor propio de edades avanzadas.
• La herencia genética. Cuando un familiar de primer grado (padre, hermano o hijo) padece un cáncer de próstata, como mínimo se duplica el riesgo. Cuando dos o más familiares de primer grado se encuentran afectados, el riesgo aumenta entre 5 y 11 veces.
• El cáncer prostático es más frecuente en la raza negra.
Herramientas diagnósticas en el cáncer prostático
Las principales herramientas que disponemos para el diagnóstico del cáncer prostático son el tacto rectal y la determinación en sangre del marcador PSA. Para alcanzar un diagnóstico definitivo es preciso la realización de una biopsia prostática que se indicará ante una alteración de los niveles de PSA en sangre o bien, si el urólogo al realizar un tacto rectal palpa una zona indurada sugestiva de cáncer.
¿Qué es el PSA?
El PSA o “Prostate Specific Antigen” es una sustancia producida exclusivamente por las células epiteliales de la próstata. Se trata de un marcador órgano específico, ya que solo lo produce la próstata pero no es un marcador cáncer específico, por lo que las concentraciones en sangre del PSA pueden aumentar también en presencia de hipertrofia benigna de próstata (HBP), prostatitis y otras situaciones que más adelante veremos. El PSA se puede encontrar en sangre unido a otras proteínas o libre. En la práctica clínica nos referimos al PSA total como la suma de ambas formas de PSA y se acepta como punto de corte el valor de 4 ng/dl.
En las últimas décadas, gracias a la determinación de niveles de PSA en sangre, ha aumentado la incidencia del tumor, pero también la supervivencia, ya que se diagnostican y tratan tumores muy pequeños, con un excelente pronóstico.
¿Qué situaciones pueden hacer elevar mis niveles de PSA?
• La hipertrofia benigna de próstata o HBP, esto es, el agrandamiento fisiológico (no tumoral) de la glándula prostática. Es quizás el motivo más habitual de elevación del PSA.
• La edad. De forma fisiológica la próstata va aumentado de tamaño con el paso de los años. En consecuencia, al haber más tejido prostático se produce más liberación de PSA.
• Las infecciones urinarias o prostatitis aumentan los niveles de PSA. Es recomendable la realización de un cultivo de orina simultáneamente a la determinación de PSA que permita descartar una infección urinaria.
• La eyaculación puede causar un aumento en el nivel de PSA por un periodo de tiempo breve. Por esta razón, algunos médicos sugieren a los hombres que se abstengan de eyacular o de mantener relaciones durante 2-3 días antes de la prueba.
• Montar en bicicleta. Algunos estudios han sugerido que montar en bicicleta puede aumentar los niveles de PSA por la estimulación directa que ejerce el asiento sobre la próstata. Existen también numeroso estudios que lo desmienten.
• Ciertos procedimientos urológicos como el propio tacto rectal o una cistoscopia pueden causar niveles más elevados de PSA por un corto periodo de tiempo. Es por ello que se recomienda no realizar la extracción sanguínea para determinar el PSA si se ha realizado un tacto rectal o cistosopia recientemente.
• Fármacos que induzcan la liberación de hormonas masculinas o tratamientos sustitutivos de testosterona.
¿Qué fármacos puedan disminuir mis niveles de PSA?
• Fármacos utilizados para el tratamiento de la calvicie y para el tratamiento de la hipertrofia benigna prostática como son la Finasteride o Duasteride. Estos fármacos reducen el volumen de la glándula prostática y en consecuencia pueden llegar a producir una reducción de hasta el 50% de los valores basales de PSA.
• Obesidad: los hombres obesos suelen tener niveles de PSA más bajos. Se ha visto que los varones obesos producen menor cantidad de testosterona.
• Aspirina: recientes investigaciones han sugerido que los hombres que toman aspirina regularmente pueden presentar niveles de PSA más bajos. Se necesitan más investigaciones para confirmar estos resultados.
• Estatinas: los medicamentos utilizados para reducir los niveles de colesterol, están vinculados a niveles más bajos de PSA si se toman durante años. Sin embargo, se ha visto que en pacientes que combinan la toma de estatinas con antihipertensivos calcio antagonistas, este efecto de reducción no se produce.
¿Cuándo y con qué periocidad debería hacerme una revisión?
Es motivo de controversia entre las diferentes sociedades urológicas la edad de comienzo de las revisiones o cribados prostáticos. La Sociedad Americana contra el Cáncer recomienda:
• Al cumplir 50 años para los hombres con riesgo normal, es decir, sin antecedentes familiares ni factores de riesgo de cáncer de próstata
• A la edad de 45 años en los hombres que tienen alto riesgo de cáncer de próstata. Entre estos hombres se encuentran los de raza negra y aquéllos que tienen parientes de primer grado (padre, hermano, o hijo) y que recibieron un diagnóstico de cáncer de próstata a una edad temprana (menores de 65 años).
• A los 40 años de edad para hombres con un riesgo muy elevado, aquellos que tienen más de un pariente de primer grado que ha tenido cáncer de próstata a una edad temprana.
Si el tacto rectal es normal, los niveles de PSA se encuentra dentro del rango de la normalidad (< a 4ng/dl) y no existen factores de riesgo elevado se acepta que:
-Si el PSA es inferior a 2.5 ng/mL la revisión puede llevarse a cabo cada 2 años.
-Si los niveles de PSA son mayores de 2.5 ng/mL o más lo más aceptado es cada año.
¿Hasta cuándo debo continuar haciéndome la revisiones?
Ya que la mayoría de los tumores prostáticos evolucionan muy lentamente, no debería ofertarse un cribado prostático a partir de los 75 años o cuando la expectativa de vida sea inferior a 10 años.
Tengo el PSA elevado. ¿Cómo sé si tengo un cáncer prostático?
Para llegar a un diagnóstico definitivo es preciso la realización de una biopsia prostática que nos permita obtener tejido de la glándula prostática y confirmar o descartar la presencia de células tumorales en la muestras. Si el tacto rectal es sospecho o bien si existe una alteración persistente en los valores de PSA nuestro urólogo debería ofrecernos la realización de una biopsia prostática.