La mayoría de las pacientes habrá pasado la época fértil, pero no existe razón por la que no se pueda realizar la concepción en una mujer joven.
Habitualmente, se aconseja que pase un periodo de 2 años desde la intervención quirúrgica para quedarse embarazada, de esta manera la cicatrización será la óptima como para soportar la tensión del desarrollo del embarazo.
Será más difícil si la paciente ha sufrido varias intervenciones previas.
En cuanto a los cuidados del estoma, hay que saber que al aumentar el volumen abdominal por el crecimiento del feto se pueden producir una serie de cambios en el estoma: cambio en el diámetro, retracción o prolapso y desplazamiento del estoma.
Todos estos cambios son reversibles y tras el parto tienden a recuperar su estado original.
En el caso de quedarme embarazada, ¿sería posible realizar pruebas como la amniocéntesis?
Portar un estoma no impide la realización de las mismas pruebas respecto a la población general, ni supone un riesgo superior a ellas.
No te preocupes si sientes que el bebé da patadas, la afectación del estoma es improbable.
En el caso de las gestantes ileostomizadas pueden llegar a requerir ingreso hospitalario ante complicaciones como la oclusión intestinal.
Debido al aumento del tamaño del útero éste puede presionar la ileostomía generando un dolor de tipo cólico y frenando el ritmo de evacuación intestinal.
Además, existe un riesgo incrementado de anemia: al que supone de por sí el embarazo (y por ello se recomienda la profilaxis con vitaminas y ácido fólico) se suma que la absorción de la vitamina B 12 se produce en el íleon distal.
¿Debo modificar mi forma de alimentación durante la gestación?
La dieta a seguir en una embarazada con o sin ostomía es la misma. Consistirá en una dieta variada con un aporte de nutrientes y calorías adecuado al desarrollo del feto.
Según las modificaciones del estoma podemos ir planificando nuestros menús diarios, poniendo especial atención en el primer trimestre, tiempo de frecuentes náuseas y vómitos que pueden acentuarse en mujeres ostomizadas y que aumentan el riesgo de deshidratación.
Si aumentan los vómitos diarios o tiene signos de deshidratación (boca seca, orina muy oscura…) debe acudir a su médico inmediatamente.
Recuerda también la importancia de la ingesta diaria de suplementos de ácido fólico y vitaminas, mencionada anteriormente, debido a la dificultad de absorción de los alimentos.
Parto, puerperio y lactancia
La vía de parto podrá ser, al igual que en las gestantes sin estoma, vía vaginal o cesárea si existe motivo obstétrico.
Tras el parto, los cuidados serán idénticos también, salvo que habrá que prestar atención a la recuperación progresiva de la forma original de la ostomía, adaptando de nuevo las formas y materiales de las bolsas y conexiones.
La lactancia materna no sólo es viable en portadoras de estoma, sino que está recomendada por los numerosos beneficios que aporta tanto para el bebé como para la madre.
Adaptar las posturas para aumentar el confort de ambos es fundamental e incrementa la confianza de la mamá en su autocuidado.
Durante esos 2 años de periodo de espera, ¿puedo utilizar cualquier método anticonceptivo?
Respecto a la contracepción hay que tener en cuenta que pueden existir problemas de absorción con los anticonceptivos orales.
A pesar de que el uso de métodos barrera (preservativo) es el más idóneo, porque no sólo previene el embarazo, sino que también nos protege de las enfermedades de transmisión sexual (ETS), hay más alternativas que pueden utilizarse siendo portadora de un estoma con la misma eficacia: anticoncepción hormonal (parche, implante…), dispositivos intrauterinos (DIU), métodos quirúrgicos…
No dudes en pedir cita con tu ginecólogo y matrona para que te orienten sobre los métodos más indicados para ti según tipo de ostomía, intervención quirúrgica…