Cirugía de prótesis de rodilla


Jon Martí Ayerdi, Carlos Sanz García, Rubén Inglán Montes y María Garralda del Villar

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En pacientes que tienen artritis de rodilla progresiva grave, que limita su función, la principal forma de tratamiento puede ser una artroplastia total de rodilla, también conocida como cirugía de reemplazo total de rodilla. Con una artroplastia total de rodilla, se utilizan una sierra, un cincel y otros instrumentos para extraer los extremos de los huesos de la rodilla y reemplazarlos con metal y plástico. Se ha encontrado que este procedimiento es muy efectivo para mejorar la función del paciente. Sin embargo, tiene algunas limitaciones.

En primer lugar, se considera que los reemplazos totales de rodilla duran hasta 15 años.  La cantidad de tiempo que duran puede depender del tamaño, la alineación y la edad del paciente. Los pacientes más pesados ​​y más jóvenes tienden a desgastar antes sus reemplazos. Por lo tanto, esto debe tenerse en cuenta cuando se recomienda el reemplazo total de rodilla para un paciente.

Los estudios en Europa han indicado que el 20 % de los pacientes más jóvenes que se someten a una artroplastia total de rodilla desearían no haberla tenido nunca.  Por lo tanto, es muy importante tratar de agotar todas las formas de tratamiento no quirúrgico, incluidos el ejercicio, los antiinflamatorios según sea necesario, las inyecciones, una rodillera, así como las cirugías artroscópicas o de realineación antes de realizar una artroplastia total de rodilla en pacientes más jóvenes.

En general, en pacientes menores de 65 años, recomendamos que traten de vivir con sus síntomas y prescindan de una cirugía de reemplazo total de rodilla si aún pueden caminar distancias sin dolor severo, no tienen que usar bastón y puede subir y bajar escaleras en tándem.  Además, es muy importante evaluar las radiografías en estos pacientes y correlacionarlas con los síntomas clínicos.  A menudo, los pacientes pueden tener «radiografías con mal aspecto», pero muchos funcionan bastante bien hasta el punto de que no estaría indicada una cirugía de reemplazo total de rodilla.
Se podría decir que los resultados de la artroplastia total de rodilla son efectivos en la gran mayoría de los pacientes.  Sin embargo, los pacientes deben seleccionarse cuidadosamente para este procedimiento porque es una cirugía muy extensa, puede ser muy dolorosa y puede implicar un largo período de rehabilitación para recuperarse. Además, es una de esas cirugías de las que uno no puede retroceder, por lo que las indicaciones para la cirugía deben ser cuidadosamente monitoreadas y seguidas.

La cirugía de reemplazo de rodilla requerirá fisioterapia y rehabilitación para que la articulación de la rodilla pueda recuperar la fuerza, el movimiento y la movilidad general. Es importante seguir el protocolo prescrito y seguir de cerca las instrucciones proporcionadas por su terapeuta. La terapia inicial se enfoca en el movimiento seguro con ciertas restricciones durante 6 semanas. Después de un período de recuperación de 2 a 3 meses, los pacientes generalmente no sienten dolor y se desempeñan bien con sus actividades normales.

AUTORES:

Jon Martí Ayerdi. FEA Cirugía ortopédica y traumatología. Hospital Universitario de Navarra
Carlos Sanz García, Rubén Inglán Montes y María Garralda del Villar. MIR Cirugía ortopédica y traumatología. Hospital Universitario de Navarra