La artroplastia total de cadera es un procedimiento común en el campo de la traumatología. Esta intervención quirúrgica consiste en la sustitución o el reemplazo de la cadera por un sistema predominantemente metálico en los casos en que los principales componentes de la articulación han sido afectados de manera irreversible, debido al envejecimiento de la población en nuestro país la artrosis es una patología cada vez más frecuente, siendo la PTC una de las intervenciones que más se realizan en los servicios de traumatología de nuestro país.
Se puede realizar este procedimiento por artrosis (desgaste) o por fractura de cadera.
La prótesis de cadera consta de varios elementos, parte femoral (vástago), cabeza y cótilo.
Sea cual sea el modelo de prótesis, la razón por la que se opere y la edad que tenga el paciente hay que seguir unas recomendaciones, y ser extremadamente cuidadoso los dos o tres primeros meses del postoperatorio.
Las principales complicaciones que puede tener la prótesis total de cadera son la infección y la luxación (la prótesis se puede dislocar o luxar si flexionamos mucho la cadera).
Cuidados principales al alta
- La herida deberá estar limpia, seca y cubierta con un apósito.
- La medicación deberá seguirse según la pauta médica prescrita.
- Los puntos deberán retirarse aproximadamente 15 días después de la intervención. Si se observan signos de rojez, inflamación, dolor o exudado de la herida deberá acudir a su centro de salud.
- La higiene diaria es más aconsejable la ducha que la bañera, recomendable el uso de un taburete alto y la sedestación para evitar caídas y resbalones. Si no le queda otro remedio que usar la bañera, no se tumbe en el fondo y utilice estos accesorios: tabla de bañera, asiento de bañera, taburete, asideros de apoyo. No intente entrar ni salir de la bañera sin usar una tabla ni asiento de bañera durante las primeras 10-12 semanas tras la operación.
Recomendaciones posturales al alta
- Evite demasiada flexión, no se incline por la cintura.
- Evitar aproximar o aducir la pierna operada, no cruce la pierna operada encima de la otra pierna, mantenga siempre los muslos operados.
- Evitar rotar la cadera hacia dentro, pie hacia dentro, no gire la pierna operada hacia dentro.
- Para sentarse agárrese a los brazos de la silla y manteniendo la espalda recta, siéntese con la pierna operada estirada, después puede flexionar la rosilla. Recuerde mantener el ángulo de 90º, evitando sillones bajos o blandos. Rodilla nunca por encima de la cadera.
- Para levantarse de la cama, hágalo siempre por el lado contrario a la pierna operada, una vez sentado en el borde dela cama, levantase apoyándose la pierna sana y con ayuda del andador.
- Para acostarse siéntese en el borde de la cama, suba a la cama la pierna no operada y después la pierna intervenida, manteniéndola recta.
- No es aconsejable acostarse sobre ninguno de los lados las primeras etapas de la recuperación, no duerma ni descanse boca abajo.
- Puede dormir boca arriba las primeras semanas con un cojín entre las piernas.
Otras sugerencias al alta
- Cuando vaya al servicio sería recomendable hacerlo con alza en el inodoro para sentarse lo más alto posible.
- Para calzarse y ponerse los calcetines utilizar calzadores de mango largo y pedir ayuda si es necesario.
- Comience siempre por el lado operado para ponerse la ropa interior, los calcetines, una falda, un pantalón. puede hacer sin problemas rotación externa (rodilla hacia afuera) de la pierna operada
- Deberá utilizar zapatilla o zapato cerrado por detrás y de suela antideslizante.
- Procura no aumentar de peso o reducirlo si existe sobrepeso.
- Evitar suelos deslizantes y cosas con las que se pueda tropezar (alfombras pequeñas, cables de electricidad, objetos en el suelo).
- Mantener los artículos de uso frecuente al alcance de la mano.
- Si tiene escaleras, usar la barandilla.
Para prevenir la infección
Vigile los focos infecciosos: forúnculos, uñas encarnadas, flemones dentales, etc. Avise en cualquier procedimiento invasivo de que lleva una prótesis (en el dentista, cirujano digestivo, urólogo…).
AUTORAS:
Ana Lorés Puértolas, María Vanessa Zamora Sierra, Laura Larramona Escario, Rebeca Marban Fernandez y Lucía Orduna del Amo.
Enfermeras en la unidad de traumatología del Hospital Universitario San Jorge de Huesca.